Estudio comparativo entre el patrón de alimentación de Argentina con las recomendaciones internacionales

Resumen

Resumen: 

La alimentación es un importante factor asociado a la ocurrencia de enfermedades no transmisibles; la malnutrición por exceso es la principal problemática actual que atraviesa el proceso salud/enfermedad. La sustentabilidad ambiental está siendo amenazada por las características existentes de la producción alimentaria. Se propone comparar: los hábitos alimentarios  en un área testigo  Argentina con el patrón alimentario saludable y sostenible que propone The EAT-Lancet Commission; el consumo que dicha comisión describe para América Latina (AL) con el de Argentina y la disponibilidad (por persona) de cada grupo de alimentos en Argentina con el patrón propuesto por Lancet. Se utilizaron las siguientes fuentes de datos secundarios: dieta de Referencia Saludable The EAT-Lancet Commission; hoja de balance alimentaria Argentina; patrones alimentarios de un área testigo Argentina,  identificados por el “Grupo Epidemiológico ambiental  del Cáncer en Córdoba” (GEACC). Se tomó de referencia los 11 grupos alimentarios propuestos por la Comisión de Lancet para realizar las comparaciones entre: los consumos observados por dicha comisión para AL con el consumo promedio de Argentina; consumo argentino con las recomendaciones internacionales y la disponibilidad alimentaria en argentina (según hoja de balance) con las propuestas por Lancet; resultando que la dieta que la comisión de Lancet describe para la región de LA  no es representativa de Argentina; el consumo de carnes supera ampliamente al de AL y los granos enteros se consumen en menor cantidad. Las diferencias se acentúan al comparar el consumo en argentina y las recomendadas por Lancet, además del excesivo consumo de carne roja y de ave y bajo de pescado se evidencia un alto consumo de harinas refinadas y bajo consumo de granos enteros y legumbres. En relación a la disponibilidad alimentaria Argentina, superan las propuestas por Lancet: carnes, vegetales almidonosos, huevos y granos enteros; otros productos, como vegetales y pescado, no alcanzan a cubrirla; frutos secos y legumbres carecen de disponibilidad. El principal reto es promover un cambio de hábitos alimentarios (tomando de referencia las recomendaciones internacionales en términos de salud y sustentabilidad ambiental), teniendo en cuenta aspectos culturales y con perspectiva de derechos.