El valor productivo de la voz en el docente

Abstract

La voz en el ser humano es una función expresiva, pero en el docente representa una herramienta, como profesional implica el desarrollo de una actividad laboral eminentemente vocal sobre agregada al uso coloquial, sin que se contemple entre las competencias desarrolladas en su formación profesional el entrenamiento en el uso técnico adecuado y el cuidado de la voz. Surgen así, los trastornos de la voz por mal uso o abuso vocal, ésto se transforma en un círculo vicioso que resiente la productividad de un recurso humano que presta servicios en la Educación. Desde 2006 en España y en otros países del mundo se la considera enfermedad profesional. El objetivo del proyecto es divulgar pautas de higiene, profilaxis vocal para acciones preventivas y estratégicas en la puesta del valor de la voz como capital irreemplazable en la actividad docente, formación e información técnica específica en el uso laboral de la voz en su campo de inserción real. La misión extensionista, hasta la fecha implicó la formación de 8 (ocho) recursos humanos en la problemática vocal del docente, tanto graduados como alumnos de la carrera de Fonoaudiología. Se implementaron encuentros a través de charlas y espacio de reflexión con docentes, directivos e inspectores de zona, de toda la provincia de Córdoba. Si bien, las capacitaciones son obligatorias por las aseguradoras de Riesgo de Trabajo, es preciso que se den en un clima de salud, sin intereses. En el impacto se contabilizaron 150 charlas, donde se reconocieron, escenarios de ejercicio desfavorables para la efectividad vocal en la práctica pedagógica, voces patológicas, malos hábitos vocales y uso de medios paliativos para seguir en actividad durante la jornada laboral. Se evidenció la necesidad de un desarrollo para una voz laboral y eficiente. El alumno extensionista como agente de salud vocal en su aprendizaje, nutre su formación a través del contacto con la realidad optimizando su asertividad como agente sanitario. En los docentes se legitima el valor productivo de su herramienta de trabajo complementando su profesionalización.