RESEÑAS. Portelli, Alessandro (2023) Dal Rosso al Nero. La svolta a destra di una
città operaia. Roma: Donzelli Editori, 269 páginas.
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Graciela Ciselli
TESTIMONIOS
Año 13 N°13 2024
ISSN 1852-4532
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Reseña de Portelli, Alessandro (2023)
Dal Rosso al Nero. La svolta a destra di una città operaia.
Roma: Donzelli Editori, 269 páginas
La pregunta central que Alessandro Portelli busca responder en su último libro Dal rosso
al nero. La svolta a destra di una città operaia es ¿qué le sucedió a la clase trabajadora de
Terni, una ciudad industrial italiana con una importante tradición de huelgas y
resistencias por parte de los trabajadores, muy cercanos a la izquierda que en estos
últimos diez años comenzó a simpatizar con las propuestas de la extrema derecha?
acompañada por otras que abren la investigación ¿Por qué la izquierda ya no es su punto
de referencia y su horizonte político está cada vez más teñido de negro? La elección de los
colores como símbolos en el título elegido no es casual: el rojo con el que siempre se ha
asociado al comunismo, pero también a la sangre derramada en las luchas y en las guerras
y el negro como rememorando las camisas negras mussolinianas, pero también a la
muerte.
El lugar elegido es nuevamente Terni, ciudad italiana ubicada en la región de Umbría, a
unos 100 kilómetros al norte de Roma que antes de la guerra tenía unos 35.000
habitantes, la mayoría trabajadores de las distintas fábricas que allí existían: de las acerías,
y luego de los productos químicos, de los textiles: Papigno, Nera Montoro, Bosco,
Centurini, Gruber, Polyme. Tal vez por su impronta industrial fue prácticamente destruida
durante la Segunda Guerra Mundial pero también esa característica fue la que le permitió
su recuperación en las décadas siguientes para convertirse en una de las de mayor peso
regional. Para Portelli, además, la ciudad está estrechamente vinculada a su propia vida: es
el escenario donde pasó su niñez y adolescencia, desde la escuela infantil de las monjas de
Villaggio Cianferini hasta el bachillerato, reconociéndose como parte de la Terni no fabril
ya que su padre era funcionario de la prefectura y su madre maestra. Sin embargo,
siempre supo que había otra ciudad, la de la fábrica y los trabajadores que intentaban
construir sus propias narrativas sobre el territorio. Allí realizó el trabajo de campo
durante la mayor parte de su vida profesional convirtiéndose en uno de los académicos
que más conoce los procesos históricos que la afectaron.
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Portelli dice que comenzó a escribir sobre la ciudad de Terni en 1985 la que se ha
transformado tanto que es necesario volver a reescribir su historia reciente porque de
otro modo sería una historia inconclusa. Por ello considera que este libro es la conclusión
de una trilogía, término más utilizado en literatura que en historia y que en esa clave hay
que interpretarlo.
Claramente no se trata de literatura sino de historia del presente, por lo cual el autor
plantea que el trabajo de historia oral no está completo si no reconecta pasado y presente:
“lo que sabíamos sobre el pasado ayudó a comprender la naturaleza radical del cambio
presente. Ésta es, pues, la historia de los últimos diez o quince años de una ciudad, con el
telón de fondo de los doscientos años contados antes”. Para Alessandro Portelli, como
investigador, es fruto de más de medio siglo de indagaciones y de cuatrocientas cincuenta
entrevistas en una ciudad convertida en laboratorio de experiencias políticas y que no se
corresponde a la industrial de los dos estudios anteriores, por lo cual se siente con la
obligación de contar esta nueva realidad citadina donde el giro a la derecha se produjo
luego de diez años de luchas de los trabajadores, en una ciudad con una gran tradición
obrera y de izquierda.
La investigación para la escritura de esta obra tiene dos fases vinculadas a los momentos
en que pudo realizar su trabajo de campo atravesado por la pandemia. La primera
realizada en los primeros meses de 2020 y la segunda después de la pandemia, entre
diciembre de 2022 y agosto de 2023 porque prefirió hacer las entrevistas “cara a cara” y
no mediadas por la tecnología. En algunos casos también utilizó otras realizadas para
proyectos de investigación anteriores. Las del año 2000 a personas de clase media y
profesionales (empezando por sus antiguos compañeros de secundaria) y las de los años
2004-2007 a trabajadores centradas en las luchas obreras en defensa del departamento
magnético de la acería y otras más "históricas", ya utilizadas en Biografia di una città
(Einaudi, Turín 1985). Todos los archivos de audio y transcripciones de obras se
conservan en el Archivo Sonoro «Franco Coggiola» del Circolo Gianni Bosio, en la Casa della
Memoria e della Storia de Roma y pueden consultarse previa solicitud. Dado que no pudo
recurrir a archivos como sucede en la investigación histórica, Portelli incluyó material
periodístico tanto impreso como digital.
Portelli sostiene que cuando comenzó a escribir este libro lo pensó más como un reportaje
sobre el pasado reciente que como un libro de historia porque el período que trata es
relativamente breve, aborda más las tramas políticas del presente que la memoria. Pero
desde los 44 días de huelga de 2014 a la elección del empresario deportivo Stefano
Bandecchi como alcalde de Terni en 2023 han habido una serie de acontecimientos que
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entrelazan la historia y la memoria. Ambas pueden ayudar a comprender el presente e
imaginar el futuro.
El libro se divide en seis capítulos con varios subtítulos que van explicando este proceso
de transformación de la ciudad. La Terni de las tradiciones inventadas, de ser reconocida
como una ciudad donde la fábrica de acero tenía presencia en todos los rincones a otra
reconvertida en una ciudad con una fábrica centro y como la Ciudad de San Valentín”,
patrona de los enamorados. “El alcalde no colocó a San Valentín ni a Cornelio Tácito en
oposición declarada a la presencia de los trabajadores, sino que los convirtió en el vehículo
de una estrategia más amplia de hegemonía cultural. Mientras Corso y Piazza Tacito
designan el centro, San Valentino pertenece a la periferia donde se levanta su modesto
santuario: no divide, sino que a su manera intenta unificar, como otra tradición
reinventada”. Porque en la ciudad del amor, no se recuerda cómo vivían los habitantes de
la ciudad del acero. La estrategia política consistió en asimilar la historia de la clase
trabajadora desactivando sus contenidos conflictivos: así las herramientas de producción
se convierten en monumentos de la memoria y los símbolos del futuro en recuerdos del
pasado.
El capítulo 1 analiza el período comprendido entre los abucheos de la Plaza de la
República en 2014 a los aplausos de 2018. En 2014, habitantes de la ciudad de Terni y de
diversos lugares de Umbría salieron a la calle para defender el empleo, la dignidad y la
historia". Los trabajadores protestaron contra los 550 despidos solicitados por la
multinacional alemana ThyssenKrupp a las acerías y contra una política industrial que
parecía prefigurar el fin de una historia industrial que durante un siglo y medio había
representado la identidad de la ciudad y su principal fuente de subsistencia. Carteles,
pancartas, procesiones mostraron un pueblo unido y movilizado enfrentando a una
multinacional que pretendía cerrar la fábrica. La unión fue puesta a prueba y los sindicatos
cuestionados. La relación de confianza entre los trabajadores de la fábrica y la izquierda
política y sindical de la ciudad comenzó a resquebrajarse y con ella la conexión
sentimental que comenzó a ser cooptada por otros oradores como Salvini que supo
aprovechar el estado de ánimo de las personas que se autopercibían como amenazadas,
ofendidas, humilladas, discriminadas y víctimas de los inmigrantes que supuestamente
amenazaban los puestos de trabajo. Y la construcción discursiva de Salvini surtió el efecto
que esperaba.
El capítulo 2 se titula “Atardecer rojo 2014” se inicia contextualizando a la Terni del 2005,
una ciudad que poseía un centro industrial de ciclo integrado, el único en Europa que,
según los entrevistados, “todos nos temían”. Sin embargo, esa fecha es marcada como la
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del inicio del dolor por el cierre de la planta magnética, buque insignia de la fábrica de
Terni, después de una temporada memorable de lucha, recordada como una de las huelgas
más largas y radicales de la historia del movimiento obrero italiano que culmina con
distanciamiento con el sindicato y entre los propios trabajadores que renuncian
voluntariamente a cambio de una indemnización por despido. “Es la culminación de una
crisis de identidad y de una desafección que venía creciendo”.
A diferencia de lo planteado en el libro anterior, Biografía de una ciudad, que mostraba
una ciudad industrial fuertemente caracterizada por los tiempos de la cultura, de la
organización de la sociedad industrial, en este, la comunidad laboral ha cambiado luego de
diversas crisis que han afectado a las industrias siderúrgica y química disminuyendo
considerablemente la población económicamente activa tanto en tamaño, composición y
peso en la ciudad. Con el cierre de la fábrica de yute Centurini en 1970, Terni también
perdió una clase trabajadora femenina combativa y consciente por lo cual la identidad de
la clase trabajadora se volvió casi exclusivamente masculina y la cultura fabril perdió
contacto con una parte esencial de la ciudad, la vida doméstica. Entre los que se fueron con
los retiros voluntarios luego de un mes y medio de huelgas vivieron la salida de modo
diverso. Diferentes conjuntos de razones motivaron estas elecciones individuales: sueño
de cambiar de vida, desencanto con el trabajo, necesidades familiares, disponibilidad de
alternativas, desilusión política, un entrelazamiento de todas estas cosas. Lo cierto es que
“el éxodo es la señal de que muchos trabajadores ya no creen en el futuro de su fábrica, ni
en su futuro en la fábrica”. Pero irse no fue la panacea que creían y la desilusión llegó
después.
El capítulo III titulado “Amanecer Negro” analiza la construcción discursiva de Georgia
Meloni y cómo fue logrando consolidarse en el poder en las elecciones regionales de 2019
donde se presenta como una líder, una guía, que no sólo anima a quienes la escuchan, sino
que explica las cosas. En esa oportunidad se dirigió a una Umbría artesanal, rural y
turística un tanto imaginaria, una ciudad muy distinta de la Umbría real donde "los
comercios artesanales cierran, los comerciantes, los agricultores", pero no aquel en el que
una de las mayores acerías de Europa entra en crisis”. Ella sabe captar qué decir acerca del
lugar de los inmigrantes en Italia, hasta dónde acercarse o alejarse discursivamente, tomar
posición sobre la delincuencia, la drogadicción y la inseguridad que se asocia a ellos. Los
siguientes candidatos de derecha continúan planteándolos como problemas a resolver.
En el capítulo IV Culturas” posiblemente la frase más potente del capítulo sea “Terni es
una ciudad que ha declarado la guerra a su propia historia”. El autor identifica una serie de
cambios en la vida cultural de la ciudad donde conviven dos historias de origen diferentes
e intercambiables: una vinculada a las raíces arcaicas, según las cuales los verdaderos
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ternianos son sólo los descendientes de los antiguos Naharti, y todos los que llegaron
después son extranjeros e inmigrantes ilegales y otra a Terni como ciudad de inmigración
y hospitalidad: «los ternianos están acostumbrados a recibir”. Luego se sumerge en las
búsquedas de los propios habitantes hacia un modelo de desarrollo alternativo a la era
postindustrial que los llevó a incursionar en el cine y en el mundo del entretenimiento con
poco éxito y que fue una ilusión de corto plazo.
El capítulo V esdedicado a la salud pública también quebrada en una ciudad que espera
no ser el basurero de Roma, que se encuentra con un gran aumento en enfermedades
cancerígenas vinculadas a su pasado industrial, con jóvenes consumidores de sustancias y
con escaso presupuesto para hacer frente a las necesidades de la población. Luego de la
movilización contra las incineradoras que ponían en riego el ambiente y la salud y la
inminente instalación de una planta regional de eliminación de lodos de aguas residuales
la población buscó nuevas alternativas políticas inclinándose hacia las propuestas de la
derecha.
A modo de cierre, el capítulo VI, Portelli realiza un balance del estado de la ciudad actual. A
muchos les preocupa la despoblación de Terni, que ha disminuido notablemente la
población más joven entre el 2010 y el 2022, mientras que el porcentaje de ancianos ha
aumentado. El resultado es que se pagan más pensiones que salarios ante la pérdida de
empleos, los matrimonios han disminuido, los divorcios han aumentado, la relación entre
matrimonios civiles y religiosos se ha invertido. Las familias son cada vez más pequeñas
generando innumerables situaciones que afectan el estado de ánimo y el clima político de
la ciudad. La escasez de empleos influye en los jóvenes que emigran en busca de trabajo, la
ciudad dejó de ser atractiva y protectora y sus habitantes se quedaron sin los tradicionales
referentes identitarios. De ahí la crisis, la búsqueda de nuevos horizontes y proyectos en
los que creer.
El proyecto de construir una nueva identidad para la Terni postindustrial en materia de
turismo y cultura se cruza entonces con una estrategia que va en la dirección opuesta y
que parece aceptar la idea de que Terni no tiene identidad propia y ni siquiera la necesita.
Graciela Ciselli
Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco
Universidad Nacional de la Patagonia Austral
Argentina
Email: graciselli@gmail.com
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-3653-8262