Puttini, María Paula. H.I.J.O.S. Córdoba. Memoria, verdad y justicia durante los años 90. Editorial Gráfica 29 de Mayo, Córdoba, 2021, 163 págs.

 

 

 

En el libro H.I.J.O.S. Córdoba. Memoria, verdad y justicia durante los años 90, María Paula Puttini busca reconstruir la constitución de H.I.J.O.S. Córdoba como colectivo a mediados de los años 90.

Las preguntas que guían la investigación, que constituye la Tesis de Licenciatura en Historia de la autora, apuntan a las trayectorias, contactos e historias de aquellos jóvenes que confluyeron en la conformación de H.I.J.O.S. Córdoba, a las demandas que estos inscribieron en el espacio público y a aquellos formatos de acción que la organización introdujo al repertorio del movimiento de derechos humanos.

Las redes e hitos que los participantes identifican como fundamentales en la historia de la organización, tales como los vínculos que tejieron con los demás organismos de derechos humanos, la importancia del elemento generacional, los efectos que tuvieron las coyunturas locales y nacionales en H.I.J.O.S. Córdoba, tanto en términos organizacionales como en los posicionamientos políticos, son algunas de las pistas fundamentales que la autora sigue a lo largo del trabajo. El libro está compuesto por una introducción, cuatro capítulos y una conclusión.

En la introducción, la autora delinea los objetivos generales de su trabajo y lo inscribe tanto en el campo de la historiografía de los movimientos de derechos humanos como en el campo de la historia reciente. La autora lleva adelante una revisión historiográfica del movimiento de derechos humanos, a partir de la cual identifica que, independientemente de la variedad de metodologías, enfoques, periodizaciones y registros, existe una coincidencia generalizada respecto a la comprensión del movimiento, que requiere considerarlo siempre en su atravesamiento con las políticas de Estado, los contextos socioeconómicos y las redes tejidas con otros actores y colectivos en las diferentes geografías. Siguiendo con esta línea, en cada uno de los capítulos la dimensión regional es analizada mediante la reconstrucción de los contextos nacionales y provinciales, así como en el devenir de los organismos en sus escenarios particulares. El enfoque comparativo, a partir de la referencia a trabajos sobre el movimiento de derechos humanos en otros espacios, contribuye a delimitar las particularidades del caso cordobés.

Con respecto a la metodología y a las fuentes utilizadas, el trabajo se vale de documentos de carácter variado. En primer lugar, ocupan un papel destacado las fuentes orales, entre las que se encuentran entrevistas llevadas a cabo por la misma autora y por otras investigadoras, así como también voces recopiladas en el Archivo Provincial de la Memoria de la Provincia de Córdoba y en dos documentales audiovisuales. Además, se utilizan materiales escritos producidos por H.I.J.O.S. Córdoba y por otros organismos de derechos humanos —volantes, editoriales, cartas públicas, afiches, folletos, entre otros, y el libro Somos asis, editado por el Taller Julio Cortázar—. Por otro lado, la autora se vale de La Voz del Interior, diario fundamental de la ciudad de Córdoba. Por último, se hace uso de la base de datos de Acción Colectiva, en la cual se reúnen acciones en el espacio público registradas en La Voz del Interior entre 1983 y 2001.

En el primer capítulo, Puttini lleva a cabo en una revisión de las categorías teóricas utilizadas en la investigación. En primer lugar, se detiene sobre algunos aspectos de la teoría de la movilización, particularmente en torno a la acción colectiva de protesta. Dentro de este marco introduce el concepto de política contenciosa, acuñado por Sídney Tarrow, que ocupará un lugar fundamental en su análisis de los escraches. Asimismo, lleva adelante una conceptualización de su objeto de estudio a partir de las características específicas de los movimientos sociales. En la misma línea, se detiene en el problema de la relación que estos entablan con el espacio público. En este marco vale la pena detenernos en el concepto de discurso oculto, acuñado por James Scott, el cual refiere al discurso que los grupos subordinados llevan adelante a espaldas del poder. Esta categoría será utilizada por la autora para describir la situación de los hijos e hijas de desaparecidxs de Córdoba. A continuación, realiza una revisión en torno al significado de los derechos humanos y repiensa algunos conceptos vinculados a ellos. Por último, lleva adelante algunas consideraciones respecto del concepto de juventudes.

Consideramos que la decisión de dedicar todo un capítulo al desarrollo del marco teórico y conceptual utilizado es acertada, ya que ayuda a focalizar en las problemáticas que atraviesan toda la investigación, las cuales se enlazan a lo largo del trabajo con las experiencias individuales y colectivas que confluyen en el proceso de constitución y conformación de la agrupación, en la cual el pasaje de lo privado a lo público ocupa un rol fundamental.

En el segundo capítulo: “La experiencia del Taller Julio Cortázar: esos H.I.J.O.S. que fueron hijos”, Puttini indaga en la historia del espacio educativo y de contención, que funcionó en Córdoba desde principios de los años 80 y estaba destinado a hijos e hijas de represaliados por el terror de Estado. El Taller Julio Cortázar fue promovido por las organizaciones de familiares de las víctimas de la represión y contó con múltiples experiencias similares en distintos lugares del país. En el marco del taller, y bajo la coordinación de un equipo interdisciplinario, lxs niñxs podían romper el silencio, hablar y expresarse con respecto a su historia, que se encontraba vedada en otros ámbitos como el barrio, la familia y la escuela.

En opinión de la autora, el Taller Julio Cortázar puede ubicarse como uno de los antecedentes directos de H.I.J.O.S. Córdoba, ya que muchxs de sus militantes habían compartido su paso por este espacio en la niñez. En el taller, más allá de la contención, se forjó un proceso de conformación de un colectivo por parte de los jóvenes, quienes participaron en manifestaciones contra los indultos a los militares en 1989.

En este capítulo se hace un extenso uso de testimonios, con miras a recuperar los recuerdos de sus participantes y las implicancias que la participación tuvo y tiene en sus historias personales. Asimismo, se busca develar cuál es el discurso oculto que circula en el taller. Con este fin también se revisan producciones de lxs niñxs en el marco del mismo.

En el tercer capítulo “‘Somos hijos de una misma historia’ La conformación de H.I.J.O.S.” se indaga en torno al nacimiento de H.I.J.O.S. Córdoba y sus primeras acciones en el espacio público. Se describen los campamentos de San Miguel y de Cabalango en 1995, donde nació la organización, y se analizan 3 hitos clave: la elección del nombre, la carta abierta que lanzaron en agosto del mismo año y la proclamación del “Día de la vergüenza nacional” tras la asunción del represor Antonio Bussi como gobernador de Tucumán.

Este proceso se enmarca en en un escenario de reactualización de la cuestión de los derechos humanos a mediados de la década de los 90, particularmente tras las declaraciones de Adolfo Scilingo sobre los vuelos de la muerte y sus repercusiones en la prensa. La autora sostiene, siguiendo las hipótesis de Luciano Alonso, que en este marco se produce una revitalización del movimiento de derechos humanos que acentúa su polimorfismo en el plano de los modos de organización, las demandas y los repertorios de acción.

La conformación de H.I.J.O.S. se ubica, tanto a nivel provincial como nacional, en un marco caracterizado por la apertura de la escucha y de reinscripción del debate sobre la memoria de lo acontecido en el país durante la década del 70. El proceso de emergencia de la organización está signado, en opinión de Puttini, por un tránsito del discurso oculto que circula entre hijxs de desaparecidxs en cuanto tales al plano público. H.I.J.O.S. toma parte en la discusión sobre los sentidos del pasado y de la militancia de sus padres, reivindicando su proyecto político y trazando una continuidad entre su militancia y la de aquellos. Este vínculo entre el pasado y el presente también se encontraba en las demandas elaboradas por la agrupación, en las cuales se marcaba un hilo de continuidad en las políticas sociales y económicas neoliberales llevadas adelante por el gobierno menemista y aquellas implementadas por la dictadura.

En el cuarto y último capítulo, “’Adonde vayan los iremos a buscar, el escrache como política contenciosa’”, se estudia la principal novedad que introdujo H.I.J.O.S. en el repertorio de acción del movimiento de derechos humanos a partir del análisis del escrache. Puttini aborda esta práctica a partir del concepto de acción contenciosa, proveniente de los estudios sobre acción social. Este tipo de acción se caracteriza por llevarse a cabo en espacios poco institucionalizados, a la vez que se realiza de manera episódica y no rutinaria. El escrache, que consiste en marchar y marcar los domicilios de los represores con el fin de generar condena social, se constituyó como un emblema de la organización.

El capítulo se ocupa del período comprendido entre el año 1998, año del primer escrache en Córdoba, y finales de 2001, signado por la derogación de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida, el inicio de los juicios por la verdad y una situación de recambio de las autoridades políticas nacionales y provinciales que, sin embargo, no impidieron el recrudecimiento de la crisis social y económica. A partir de la descripción de esta coyuntura, Puttini identifica el marco de oportunidades políticas que constituyeron la condición de posibilidad de los escraches en Córdoba.

La autora ubica el escenario cordobés mediante un análisis comparativo de las particularidades que tuvieron los escraches en las distintas regionales de la Red H.I.J.O.S. en cuanto a las acciones y las discusiones en torno a ellos. En Buenos Aires los escraches comenzaron en 1995, por lo que, cuando en 1998 se llevaron a cabo los primeros escraches en Córdoba, en la opinión pública ya había una asociación entre la agrupación y esta práctica.

Valiéndose de una amplia variedad de documentos, Puttini reconstruye la práctica del escrache. Mediante el acceso a la base de datos de la Acción Colectiva reconstruye sus tiempos y las geografías. A partir de testimonios, notas de prensa y folletos de la organización, pone la mirada sobre las fases de la organización, los objetivos perseguidos, las demandas expresadas y los elementos que se ponían en juego en la puesta en escena del escrache.

Esta práctica se constituyó como una marca identitaria y distintiva de H.I.J.O.S. a nivel nacional, pero que, a la vez, excedió el escenario de las demandas de Memoria, Verdad y Justicia, y fue adoptada por diferentes actores y colectivos con otras demandas.

El libro cumple los propósitos definidos al comienzo de la investigación, es decir, un análisis de las especificidades de H.I.J.O.S Córdoba en sus primeros años y las características de su accionar en el espacio público. Desde el punto de vista metodológico, el trabajo tiene, en nuestra opinión, tres virtudes. Por un lado, la preocupación por reconstruir los contextos nacionales y regionales contribuye a situar en tiempo y espacio a su objeto. Es notable, también, el esfuerzo por dilucidar las condiciones de emergencia de la organización Por otro lado, el lugar que ocupan los testimonios de quienes forman y formaron parte de H.I.J.O.S. Córdoba: la voz de los y las protagonistas permite la reconstrucción de la memoria colectiva de la agrupación, así como de las implicancias subjetivas que esta tuvo en sus miembros.

En conclusión, el trabajo de María Paula Puttini es un aporte valioso a la historiografía del movimiento de derechos humanos, ya que enriquece el estudio de las prácticas políticas juveniles en la década de los 90 en Córdoba.

 

Pedro Cuello

pedrocuello98@gmail.com

Universidad Nacional de Rosario, Argentina