Aprendizaje activo de física en enseñanza a distancia
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REVISTA DE ENSEÑANZA DE LA FÍSICA, Vol. 33, no. 2 (2021) 564
sino también en la enseñanza de las otras ciencias experimentales y la matemática (Freeman, Eddy, McDonough,
Smith, Okoroafor, Jordt, & Wenderoth, 2014). Las estrategias de AA tienen como objetivo principal incorporar en los
alumnos una sólida base conceptual de la física, haciéndoles partícipes directos de sus propios procesos de
aprendizaje. Esto se logra a través de actividades en las cuales los estudiantes están intelectualmente (y en algunas
actividades inclusive físicamente) activos realizando diversas tareas, generalmente en pequeños grupos,
beneficiándose así del aprendizaje social para lograr conocimientos más profundos y duraderos (Sirur Flores y
Benegas, 2021).
Varias y exitosas estrategias de aprendizaje activo se han desarrollado para las diversas actividades de un típico
curso de física, incluyendo desde las clases “teóricas” multitudinarias, hasta el trabajo en grupos relativamente
pequeños, como las tareas de laboratorio y de resolución de problemas (Meltzer & Thornton, 2012). En general,
además, estas estrategias de enseñanza activa utilizan diversas tecnologías de la comunicación e información (TIC),
las que desempeñan un rol muy importante como mediadoras entre los alumnos, el docente y el material curricular,
en procesos que a veces se definen como aprendizaje colaborativo mediado por computadoras (computer supported
collaborative learning, ISLS, 2021).
El enorme crecimiento de actividades de enseñanza a distancia de los últimos tiempos, con actividades tanto
sincrónicas como asincrónicas, incrementadas de manera exponencial por la emergencia covid-19, potencian aún más
las iniciativas para adaptar estrategias exitosas de enseñanza de aprendizaje activo a las formas no-presenciales de
enseñanza. Bajo estas premisas, y pensando en la importancia de incorporar diversas TIC a los procesos de enseñanza
y aprendizaje, en este trabajo se presenta una manera de adaptar las clases interactivas demostrativas (CID, Thornton
y Sokoloff, 2004) a la modalidad de trabajo práctico remoto y asincrónico.
El objetivo original de las CID es reemplazar lo que tradicionalmente llamamos una clase “teórica” por una serie
de experimentos demostrativos (realizados por el docente). La gran diferencia es que, en lugar de una clase expositiva,
en cada CID los alumnos están intelectualmente activos, realizado tareas en forma individual primero (predicción)
para luego compartir su producción con los compañeros más cercanos a su lugar en el aula, y eventualmente con todo
el curso. En su forma original, basada en el aprendizaje social y presencial, para desarrollar un tema (velocidad, por
ejemplo), se llevan a cabo una serie de experimentos (en general de 5 a 8), siguiendo para cada uno de ellos una
secuencia de trabajo de ocho pasos. El docente comienza mostrando el experimento a describir, sin realizar
mediciones. A partir de esta demostración los alumnos realizan alguna predicción (una gráfica x vs. t, por ejemplo).
Luego, cada alumno discute sus predicciones con los compañeros más cercanos, explicando la razón de sus
predicciones, intentando arribar a una explicación en común. El docente registra las predicciones de toda la clase y a
continuación realiza nuevamente el experimento, pero esta vez accionando la detección electrónica, conectada a una
computadora con un software de registro y representación de datos. Esta representación de los datos experimentales
es la respuesta correcta y la que debe compararse con las predicciones. Cada experimento finaliza con un alumno
explicando el porqué de esta respuesta correcta, citando, si fuera posible, situaciones similares de la vida cotidiana.
Es claro que esta metodología, basada en experimentos y el aprendizaje social, es difícil de implementar en forma
remota. Sin embargo, tanto los experimentos propuestos como la secuencia de actividades (observación, predicción,
discusión, registro respuesta correcta y reflexión sobre la respuesta elegida) son derivados de la investigación
educativa sobre los principales problemas de aprendizaje en cada tema de la física y podrían ser utilizados en la
enseñanza a distancia.
En el presente trabajo se describe cómo algunas CID se han adaptado como trabajos prácticos realizados en forma
remota, reemplazando la base experimental por una de simulación, en particular utilizando la amplia base de
experimentos simulados que ofrecen las simulaciones PhET (PhET, 2021), el programa desarrollado por el grupo de
investigación en enseñanza de la física de la Universidad de Colorado. Aunque no es el objeto de la presente
experiencia, destacamos que esta estrategia didáctica, CID + simulaciones PhET, también podría ser utilizada en la
enseñanza presencial, en ambientes que no dispongan del equipamiento experimental necesario para utilizar la
estrategia CID original, una solución que también podría extenderse (López Tabares, 2020; López Tabares y Orozco
Martínez, 2017) a otras metodologías de enseñanza basadas en experimentos como es el caso, por ejemplo, de Real
Time Physics (Sokoloff y Thornton, 2004) y Workshop Physics (Laws, 1997).
Describiremos a continuación el esquema de trabajo a distancia implementado en un curso de física general
ofrecido para futuros profesores de matemática y profesores de biología. En este curso se implementaron, como
actividad optativa, prácticas basadas en simulación. Se mostrará en detalle una guía de trabajo estudiantil para la CID
denominada “Aceleración”, complementada por los datos obtenidos de una encuesta de opinión estudiantil sobre
esta estrategia y modalidad de trabajo. Finalmente, se agregan algunas reflexiones y recomendaciones para docentes
interesados en su utilización tanto en cursos introductorios de física universitaria como en aquellos destinados a la
escuela secundaria.