https://doi.org/10.53971/2718.658x.v13.n21.37806
Diccionario de términos críticos de la literatura y la cultura en América
Latina
Colombi, B. (Coord.). (2022). Diccionario de términos críticos de la literatura y la cultura en
América Latina (556 pp.). Buenos Aires: Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales. (CLACSO).
María José Sabo
Universidad Nacional de Córdoba. CONICET
merisabo@gmail.com
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-7808-2873
Recibido 18/05/2022 Aceptado 29/05/2022
El Diccionario de términos críticos de la literatura y la cultura en América Latina1 se
propone, como enuncia en la introducción Beatriz Colombi, su coordinadora, “elaborar un
vocabulario de conceptos y palabras clave frecuentes en nuestra práctica docente, crítica y de
investigación, desde una perspectiva situada en América Latina(p. 11). En este sentido, el
volumen ofrece un acervo bien nutrido de términos cuidadosamente seleccionados, ordenados
por orden alfabético, tal como indica el formato del diccionario, pero convocando
Obra bajo Licencia Creative Commons 4.0 Internacional
Recial Vol. XIII. N° 21 (Enero-Julio 2022) ISSN 2718-658X. María José Sabo, Diccionario de términos críticos
de la literatura y la cultura en América Latina, pp. 296-300.
permanentemente la potencia dialógica que cada uno de estos conceptos provee y dando lugar
protagónico a los reenvíos entrecruzados entre ellos que complejizan sus alcances reflexivos.
De este modo se conforma un panorama muy completo de las discusiones críticas,
pensamientos y elaboraciones teóricas sobre el Latinoamericanismo de extraordinario valor
crítico.
El Diccionario nos interpela desde una primera postura metacrítica: la apelación a la
idea de “términos críticos” en detrimento de la de “conceptos”, inscribiéndose de esta manera
en un modo latinoamericanista de concebir las formalizaciones epistemológicas dentro del
campo de estudios, y que bien podría remontarse hasta el pensamiento de Andrés Bello: la
apuesta por escurrirse estratégicamente de las zonas de reflexión fuertemente estructuradas o
unificadas, para ubicarse más bien dentro de una modalidad de producción del saber
atravesada por la contingencia y el ejercicio permanente de la revisión. Nos enmarca así en el
ámbito de lo procesual y lo arborescente. La idea de “términos críticos”, que intitula el
volumen, se sustrae a las pretensiones abstractas de los saberes, y ello se pone de manifiesto
en las formas en que cada término es trabajado, siendo cada uno enraizado a su contexto
histórico, discursivo y cultural de emergencia para poder dar cuenta de las políticas culturales
que los permean y que modelizan formas de lectura y escritura crítica.
El volumen abreva de una tradición de trabajos críticos de peso en el área de los
estudios latinoamericanos destinados a la especificación y puesta al día de herramientas
conceptuales. Entre estos antecedentes se encuentran el Léxico de lingüística y semiología de
Nicolás Rosa, de 1978, el volumen Términos críticos de la sociología de la cultura,
coordinado en 2002 por Carlos Altamirano, y el Diccionario de estudios culturales
latinoamericanos, publicado en 2009 y coordinado por Mónica Szurmuk y Robert Mckee
Irwin, entre otros. Hay un fructífero diálogo con estas producciones, que se ve reflejado, por
ejemplo, en el diseño sumamente eficaz que adquiere el diccionario, en el cual las entradas
lexicales y conceptuales aquello que Szurmuk e Irwin llamaban “el empeño taxonómico”
(2009) estarán cada una a cargo de un investigador/a especializado/a que lleva a cabo
tareas fundamentales para el proceso de delimitación conceptual, por un lado ordenando las
diversas aristas críticas que se suscitan bajo un mismo término teórico-crítico, como también
historizando las condiciones de su emergencia en el campo y, finalmente, ofreciendo una
proyección del mismo dentro de la agenda latinoamericanista. De esta manera, cada una de
las entradas condensa debates neurálgicos de la literatura y la cultura de la región que se
interrelacionan a su vez, de forma variable pero sostenida, con el resto, enriqueciendo cada
aporte y expandiendo sus alcances. Es de destacar que cada uno de los investigadores/as que
escriben en el volumen tiene una trayectoria de producción de pensamiento vinculada
particularmente al término que desarrollan, lo cual redunda en un espesor reflexivo notable.
Esta polifonía de voces pone en evidencia un mapa geocultural de producción de
saber que es también una apuesta por abrir el diálogo a investigaciones provenientes de
espacios académicos diversos, y que por ello mismo da necesaria cuenta de los circuitos
actuales de la praxis crítica latinoamericana. Si bien hay una presencia prominente de
investigadores/as argentinos/as que se desempeñan ya sea en espacios céntricos del país en
tanto que el volumen nace vinculado estrechamente a proyectos de investigación radicados en
la Universidad de Buenos Aires, como en universidades nacionales de distintas provincias
argentinas, las voces provenientes de espacios académicos norteamericanos (José Antonio
Obra bajo Licencia Creative Commons 4.0 Internacional
Recial Vol. XIII. N° 21 (Enero-Julio 2022) ISSN 2718-658X. María José Sabo, Diccionario de términos críticos
de la literatura y la cultura en América Latina, pp. 296-300.
Mazzoti, Robert McKee Irwin, Graciela Montaldo, Rocío Quispe-Agnoli) y de otros países
latinoamericanos (Raúl Antelo, Liliana Weinberg, Mario Rufer, Carlos García-Bedoya,
Sarissa Carneiro) construyen una trama de intercambios intelectuales que en buena medida
conjura la “disglosia” que Antonio Cornejo Polar veía cernirse sobre la crítica
latinoamericana hacia mediados de los años 90. Vinculado a ello, no debe pasarse por alto la
apuesta del libro y de la editorial por el acceso libre al conocimiento, dando la posibilidad de
descargarlo gratuitamente de la página web de Clacso. Y son, asimismo, los propios términos
propuestos como léxico especializado los que dan cuenta de estos vasos comunicantes de los
que se nutren, emergiendo muchos de ellos en locus de enunciación intersticiales, dislocados
y signados por las operaciones de reapropiación y reformulación crítica (“ojos imperiales”,
“borderlands”, “flexión de género”, “la isla que se repite”). Los trasvasamientos entre áreas
disciplinares y entre las geolocalizaciones de las agendas de debate establecen la dinámica
fluida de construcción de saberes en la región. Y en este sentido, también ponen de relieve las
condiciones específicas actuales en las que se lleva adelante la praxis crítica del
Latinoamericanismo, dentro de las que es dable observar el decisivo peso de las universidades
con sus propias políticas de investigación como espacio formador de especialistas en el área y
así, impulsor clave en la transmisión del Latinoamericanismo en tanto legado de pensamiento,
un rol que hasta hace unas cadas estaba ocupado especialmente por las revistas. Una
universidad que se halla atravesada por los activismos de base; los feminismos, los
negrismos, las indigenidades contemporáneas, el movimiento chicano, los anticolonialismos,
derechos humanos, entre otros, y que interpelan así la producción de saber en el área,
dinamizando los constructos conceptuales que la literatura y cultura de América Latina se da
a sí misma para pensarse.
La “Introducción” al Diccionario, a cargo de Beatriz Colombi, establece valiosas
coordenadas generales de lectura. En primer lugar se deja establecido que los términos críticos
incorporados son de procedencia múltiple, excediendo el repertorio específico de temas y
problemáticas fijado medianamente por las agendas de mayor peso en el Latinoamericanismo,
como la de los Estudios Culturales o el Poscolonialismo. Lo que se busca mapear son las
sinuosidades del Latinoamericanismo crítico a través y más allá de los sucesivos recambios de
agenda y, como señala Colombi, en el “deslizamiento de las fronteras disciplinarias” (p. 11).
Por otro lado, Colombi propone también algunas posibles interconexiones entre los
conceptos, cada una de ellas fundamentadas en hipótesis críticas de peso, y que funcionan
como microcircuitos de lectura al interior del Diccionario. El entramado que se señala entre
colonialidad, sujeto colonial, semiosis colonial, crónica mestiza, visión de los vencidos, ojos
imperiales, la invención de América, pone en evidencia el punto de partida crítico para la
conformación del volumen, este es que la condición colonial de América Latina se vuelve
“una trama central y de insoslayable consideración(p. 18). La necesaria puesta en juego de
la persistencia de la condición colonial en las consideraciones actuales de la cultura y la
literatura de la región constituye un planteo que viene a romper con ciertas tendencias de
repliegue y separación en el área a partir del formato curricular académico en una Literatura
Latinoamericana I y otra Literatura Latinoamericana II, muy asiduo en nuestras universidades
argentinas, donde una se enfoca en el recorrido por el período colonial y sus problemáticas,
llegando al modernismo, y la otra, en los fenómenos culturales del siglo XX y XXI, algo que
culmina por dificultar las conexiones profusas entre sendos espacios de pensamiento e
Obra bajo Licencia Creative Commons 4.0 Internacional
Recial Vol. XIII. N° 21 (Enero-Julio 2022) ISSN 2718-658X. María José Sabo, Diccionario de términos críticos
de la literatura y la cultura en América Latina, pp. 296-300.
investigación. Otro microcircuito conceptual lo constituyen los términos antropofagia,
contrapunteo, transculturación, heterogeneidad, culturas híbridas, entre otros, que Colombi
señala obedecen a la pregunta por los instrumentos de análisis necesarios para las
producciones culturales latinoamericanas regidas por la heterogeneidad. Los términos de
entre-lugar, dialéctica del malandraje, barroco de indias, neobarroco, los raros, expresión
americana, ideas fuera de lugar, entre otros, dan cuenta, propone la coordinadora, de las
diversas modalidades de respuesta cultural latinoamericana ante los modelos metropolitanos,
relacionados a su vez con otro segmento de interconexiones terminológicas que ponen de
manifiesto “el particular modo de situarse respecto del parteaguas de la modernidad(p. 20),
estos son: colonialidad, modernidad literaria latinoamericana, los raros, cosmopolitismo. El
concepto de archivo americano, sostiene Colombi, pone de manifiesto la “lectura de los
repertorios del pasado desde las huellas del presente [invitando] a la ponderación de lo
faltante, silenciado y marginado (p. 18), en este sentido puede ser vinculado con los
conceptos de política de la pose y flexión de género. Otro conjunto de términos reflexiona
sobre una zona de la crítica latinoamericana particular, que ha problematizado los modos en
que se construyeron las discursividades nacionales: ficciones fundacionales, mestizaje, ideas
fuera de lugar, criollo/criollismo, borderlands. El Caribe como zona cultural atravesada por
especificidades y por una tradición de lecturas críticas particular, es abordado en los términos
contrapunteo, isla que se repite, negritud/créolité, Calibán, expresión americana. El
ensayismo americano en tanto uno de los lenguajes más relevantes de la crítica
latinoamericana, se nutre del entramado entre los conceptos de nuestra expresión, la utopía
de América, sensibilidad americana, contrapunteo, expresión americana y las eras
imaginarias, tradición de la ruptura, culturas híbridas, neobarroco, entre otros. La reflexión
crítica sostenida acerca de la conformación de los letrados coloniales es abordado a través del
diálogo entre los conceptos de ciudad letrada, letrado americano, religación, máscaras
democráticas del modernismo, política de la pose, modernidad literaria latinoamericana,
entre otros. Por último, términos como tretas del débil, borderlands, colonialidad, política de
la pose, flexión de género iluminan conceptualizaciones sobre el género que, proviniendo de
agendas europeas o norteamericanas “tienen una elaboración diferenciada y desplazada en los
estudios latinoamericanos” (p. 20).
Destaco para finalizar una operación metacrítica sumamente interesante y productiva, que
tiene que ver con la formalización conceptual de términos que en principio no fueron gestados
con dicho propósito o que durante bastante tiempo circularon por la crítica y las investigaciones
sin ese carácter. Es el caso de, por ejemplo, los raros, devenido del libro homónimo de Rubén
Darío, o de políticas de pose, término que fuera acuñado por Silvia Molloy en sus estudios
llevados a cabo entre la década del ’80 y los 2000, o las tretas del débil, título de un ensayo de
Josefina Ludmer de 1982 ambos convergiendo en otro término también medianamente inédito
en nuestro ámbito crítico que es el de flexión de nero, como asimismo el de borderlands,
término retomado por la escritora chicana Gloría Anzaldúa en su libro de 1987. Todos ellos,
exceptuando los raros, ponen de manifiesto una producción teórico-crítica que se ubica
temporalmente entre fines los años 70 y fines de los 90, pero que, hasta el momento, si bien por
supuesto no eran desconocidos, no habían sido jerarquizados dentro de la praxis crítica
latinoamericanista como pertenecientes a su léxico especializado. Comparten el mismo horizonte
temporal con el proyecto de la modernidad crítica latinoamericana, definida
Obra bajo Licencia Creative Commons 4.0 Internacional
Recial Vol. XIII. N° 21 (Enero-Julio 2022) ISSN 2718-658X. María José Sabo, Diccionario de términos críticos
de la literatura y la cultura en América Latina, pp. 296-300.
por los aportes decisivos de Cornejo Polar, Rama, Pizarro, Retamar, Losada, con la
elaboración de categorías raigales y amplias como las de heterogeneidad o ciudad letrada, y
por ello, podríamos aventurar que han quedado rezagados detrás de ellas. Por otra parte,
podríamos pensar que sus contextos académicos de elaboración, como los núcleos
problemáticos que abordan y los materiales teóricos con que entraron en diálogo también
resultaron en cierta medida problemáticos dentro de una discursividad crítica fuertemente
identificada con la elaboración de categorías “propias”. Pero su requerimiento en este
diccionario pone de relieve el recambio de agendas que, atentas a las demandas de las luchas
feministas o de lxs chicanxs, entre otras, conminan a revisar hacia el seno mismo de la crítica
sus propias políticas del archivo.
El Diccionario de términos críticos de la literatura y la cultura en América Latina
constituye un trabajo colectivo de extraordinario valor, abordando con rigurosidad y
profundidad los términos clave del Latinoamericanismo, actualizando su bibliografía, y
dando una visión amplia de este a través de sus debates troncales.
1 Disponible en
http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/se/20211115020734/Diccionario-terminos-criticos.pdf
Obra bajo Licencia Creative Commons 4.0 Internacional
Recial Vol. XIII. N° 21 (Enero-Julio 2022) ISSN 2718-658X. María José Sabo, Diccionario de términos críticos
de la literatura y la cultura en América Latina, pp. 296-300.