EDITORIAL

 

 

Nace un nuevo número de Polémicas Feministas y ello nos invita a reflexionar sobre los acontecimientos que nos marcaron en este período, un año intenso que, sin dudas, está dejando fuertes huellas en nuestras vidas, singulares y colectivas, luces y sombras en nuestros cuerpos y afectos. 

Un nuevo ciclo que reabrió las posibilidades del encuentro presencial y también la integración -con dudas, resistencias y contradicciones- de los aprendizajes y las formas que desarrollamos en las modalidades virtuales. Una textura mixta, a veces virtuosa, a veces no tanto, que nos propone un estar juntxs en el pensar, el crear, el trabajar en los espacios de proximidad y también en los enlaces lejanos, algunos hasta remotos. Enlazar, conectar y crear de formas revitalizadas en un año cargado de incertidumbre e inestabilidad -no sólo económicas, sino también afectivas. Un conjunto de factores que pueden derivarse en parálisis y desmotivación, pero que, sin embargo, también pueden ser fuente de innovación, de creación de lo radicalmente nuevo. Una invitación a la imaginación de nuevas maneras de estar juntxs en un planeta al que cada vez le cuesta más sostener la vida, al menos  tal y como la estamos llevando a cabo. 

En ese andar, un repaso por algunas de las instancias inspiradoras de este ciclo de Polémicas nos lleva a la participación de un evento novedoso y motivador que se gestó desde la premisa: “Publicar en revistas de Estudios de Género y Feminismos. ¿Qué nos recomiendan las editoras?”. Esta actividad estuvo organizada por la Comisión de Grupos de Escritura de la Asociación Argentina de Investigación en Historia de las Mujeres y Estudios de Género. Junto a las editoras de las revistas La Aljaba, Zona Franca, Descentrada y Mora, pudimos reconocer nuestro crecimiento como Polémicas Feministas, como parte de las principales revistas feministas del país, de la mano de la interpelación masiva de los feminismos en nuestra actualidad. Y, a su vez, pudimos compartir y reconocer de manera colectiva la precariedad de nuestras condiciones de trabajo. Porque corroboramos cómo en la mayoría de los casos las revistas feministas se sostienen gracias al compromiso académico y activista de muchas personas que, a través de proyectos editoriales, conjugamos diversas modalidades de creación colectiva basada en nuestras pasiones y convicciones y con expectativas de articulación e incidencia en las comunidades de las que formamos parte. Esto conforma una médula vital que da fuerzas a las instancias de producción en las revistas, pero también se conjuga con la necesidad de combinar las innumerables tareas de los proyectos editoriales con las que conforman el resto de nuestra vida laboral remunerada y no remunerada. De allí que, usualmente, la sobrecarga y el cansancio aparezcan como elementos que, sumados a la escasez de recursos, limitan la organización efectiva de nuestro rol editorial. Hechos y desafíos sobre los que será necesario seguir pensando y resolviendo en cada caso.

Otros de los grandes eventos inspiradores en los que participamos este año, fue el VI Congreso Género y Sociedad -que organizamos desde el Área Feminismos, Género y Sexualidades, el Programa Interdisciplinario de Género, el Doctorado en Estudios de Género del Centro de Estudios Avanzados, y el Programa de Extensión Feminismos, Sexualidades y Derechos de la Facultad de Ciencias Sociales-  y el Encuentro Plurinacional de Mujeres, Tortas, Travestis y Trans,  realizado en la ciudad de San Luis del 8 al 10 de octubre. En ambas instancias, potentes y plenas de reencuentros y abrazos, tuvimos la oportunidad de escuchar múltiples voces que abren camino a nuestros interrogantes y ofrecen faros para la acción colectiva de este nuevo tiempo: proyectos de vida personales, afectivos, políticos, académicos, teatrales, editoriales, que recrean posibilidades para otros mundos posibles en el presente. Aunque estas construcciones no se produzcan sin tensiones. Baste mencionar el inédito acontecimiento en la historia de los Encuentros del impulso organizativo de un segundo Encuentro, conformado en disonancia con la modificación del nombre -de lo “Nacional” a lo “Plurinacional” y en la multiplicación del singular “Mujeres”, por el “Mujeres, Tortas, Travestis y Trans”. Dado el amplio protagonismo de los feminismos en distintas fuerzas y proyectos políticos, seguirá siendo objeto de reflexión y análisis futuro comprender estas circunstancias como habilitadoras de una división o, por el contrario, de una multiplicación de nuestros Encuentros.  

Un 2022 largo y complejo, en este sentido, marcado por mojones luminosos y desafíos para la acción colectiva feminista en los espacios académicos y los activismos. Un 2022 signado por un escenario nacional, regional e internacional que combina procesos inflacionarios de escala e impacto diferenciales, con crecientes formas de violencias que se hicieron manifiestas, de forma extrema, en el caso impactante de intento de asesinato de la vice Presidenta argentina Cristina Fernández y en las expresiones de violencia racista, sexista y homófoba del bolsonarismo brasilero. Lo que, en conjunto, renueva una serie de desafíos políticos, culturales y afectivos a la hora de resistir y desactivar las formas extremas de opresión, algunas ya muy conocidas por los feminismos y las disidencias, pero otras recrudecidas de maneras insospechadas. Circunstancias que, en definitiva, reclaman la urgente e inmediata disposición a la articulación y a la escucha, por sobre la acentuación de lo que separa y aturde.

En este escenario, desde este nuevo número de Polémicas Feministas renovamos nuestras esperanzas de la manera que podemos: poniendo a disposición un espacio singular de escritura, de conversación, de disputa, y de creación. Y la muestra contundente de la necesidad de esta instancia fue la recepción de más de 30 trabajos que, luego de las instancias de evaluación por pares, fueron en su mayoría distribuidos en las distintas secciones de la revista, encabezadas por el Dossier: “Género, afectos, ficción”. También se publican Homenajes a nuestras grandes que ya no están, pero cuyo legado permanece activo en nuestras prácticas políticas y académicas: Angélica Gorodischer, Francesca Gargallo y bell hooks. También contamos con ensayos, artículos libres, e investigaciones incipientes, una traducción inédita y necesaria de la gran antropóloga Esther Newton y una Producción de Saberes desde el Arte del colectivo cordobés Bordamos por la Paz. Finalmente, una novedad editorial reunida en la sección de estreno: La Polémica. Como una manera de agenciar nuestro nombre, invitamos a referentes locales a polemizar sobre una temática -en este número, desde una temática vinculada al Dossier relativa a las prácticas que se conocen por su denominación en inglés como pinkwashing y queerbaiting- para luego abrirla al público lector. Quienes estén interesades, podrán participar desde nuestra página web, siguiendo el link habilitado en el resumen de La Polémica.

Pequeñas y potentes acciones de escritura y conversación reunidas en este número 6 en la singularidad de una revista feminista que tiene el horizonte de ser fruto renovado y crujiente que abona a una tierra en común. Tierra de cuerpos, de barro, de salvia, de afectos, que intenta no sucumbir a las violencias, al extractivismo, al desmonte, ni al desamor.

EQUIPO EDITORIAL

Polémicas Feministas