ARTÍCULOS ORIGINALES
TRAYECTORIAS SANITARIAS DE MUJERES CONSUMIDORAS DE COCAÍNA Y/O CANNABIS DURANTE EL EMBARAZO. ESTUDIO DE COHORTE RETROSPECTIVO EN LA PAMPA, ARGENTINA.
HEALTH TRAJECTORIES OF WOMEN WHO USED COCAINE AND/OR CANNABIS DURING PREGNANCY. RETROSPECTIVE COHORT STUDY IN LA PAMPA, ARGENTINA.
CAMINHOS DE CUIDADOS DE SAÚDE DAS MULHERES QUE CONSOMEM COCAÍNA E/OU CANNABIS DURANTE A GRAVIDEZ. ESTUDO DE COORTE RETROSPECTIVO, LA PAMPA, ARGENTINA.
Marina Villarreal1,2, Valeria Belmonte3, Jorge Luis Olivares1,2, Agustina Abdala1
Mail de contacto: marvillarreal@cpenet.com.ar
Conceptos clave:
Qué se sabe sobre el tema
Las mujeres consumidoras de cocaína y/o cannabis durante el embarazo tienen mayor frecuencia de complicaciones que las no consumidoras, descriptas durante la gestación y el período perinatal. Pero con posterioridad a esos períodos, los estudios son escasos, por lo cual se desconocen sus trayectorias sanitarias años después del parto.
Qué aporta este trabajo
Adjunto el archivo
Describe que las consumidoras de cocaína y/o cannabis durante el embarazo tienen mayor número de enfermedades, consultas médicas y odontológicas de emergencia, internaciones, y más muertes violentas en el grupo familiar directo que las no consumidoras, durante 4 años posparto. Además, describe que tienen significativamente mayor frecuencia de antecedentes de violencia en sus infancias y de enfermedades previas y adquiridas que las no consumidoras.
Resumen:
Introducción: el consumo de cocaína y cannabis durante el embarazo constituye un problema en ascenso, de importancia para la Salud Pública mundial. Las mujeres consumidoras pueden presentar un amplio rango de complicaciones durante el embarazo y perinatales, pero los conocimientos sobre su evolución posterior son escasos. Objetivos: describir las trayectorias sanitarias durante 4 años de mujeres consumidoras de cocaína y/o cannabis durante el embarazo, y compararlas con mujeres no consumidoras. Métodos: estudio de cohorte retrospectivo con grupo de comparación doble. Las mujeres consumidoras fueron detectadas en el Servicio de Neonatología de un Hospital público con prueba en orina posparto positivo para cocaína y/o cannabis, entre 2009 y 2013. Resultados: se evaluaron 29 mujeres consumidoras, y 58 no consumidoras. En el primer grupo, el 93% eran policonsumidoras. Las mujeres consumidoras presentaron mayor frecuencia de: antecedente de violencia en sus infancias (p<0,001), enfermedades previas (p<0,0045) y adquiridas (p<0,0007), consultas médicas (p<0,0001) y odontológicas (p=0,0002) de emergencia, internaciones (p<0,0001) y muertes familiares violentas, comparando con no consumidoras.
Conclusión: las mujeres consumidoras de cocaína y/o cannabis durante el embarazo presentaron mayores antecedentes de violencia y enfermedad, de consultas médicas y odontológicas de emergencia, de internación y muertes violentas en el grupo familiar, que las no consumidoras. Los traumatismos constituyeron la principal causa de consulta e internación. En las variables evaluadas, las diferencias entre consumidoras y no consumidoras del embarazo fueron significativas.
Palabras clave: cocaína; cannabis; embarazo; atención a la salud; hospitalización.
Abstract:
Introduction: the use of cocaine and cannabis during pregnancy is a growing problem, of importance for the World Public Health. Women can present a wide range of complications during pregnancy and perinatally, although knowledge about evolution thereafter is scarce. Objectives: to describe and compare health trajectories up to 4 years pospartum of user and not user women of cocaine and/or cannabis during pregnancy. Methods: retrospective cohort study with a comparison group consisting of 2 not users women for each user during pregnancy. User women were detected in Neonatology Division of a public Hospital with an urine pospartum test, between 2009 and 2013. Results: 29 women cocaine and/or cannabis users during pregnancy, and 58 not users were evaluated. In the first group, 93% women were polydrug users. Users had higher frequency of: history of violence in childhood ((p<0,001), previous (p<0,0045) and acquired (p<0,0007) disease, medical (p<0,0001) and odontological (p=0,0002) emergency consultations, hospitalizations (p<0,0001), and violent deaths in relatives, compared with non users.
Conclusions: women who used cocaine and/or cocaine during pregnancy had a greater history of violence and illness, emergency medical and dental consultation, hospitalization and deaths, than non users. Injuries where the main cause of hospitalization. In the variables evaluated, the differences between consumers and non-consumers of pregnancy were significative.
Key words: cocaine; cannabis; pregnancy; health care (Public Health); hospitalization.
Resumo
Introdução: o uso de cocaína e cannabis durante a gravidez é um problema crescente, de importância para a Saúde Pública Mundial. Mulheres consumidoras podem apresentar uma ampla gama de complicações durante a gravidez e os perinatais, embora o conhecimento sobre sua evolução subsequente seja escasso. Objetivos: descrever as trajetórias de saúde de mulheres consumidoras de cocaína e/ou cannabis durante a gravidez e compará-las com mulheres não-consumidoras. Métodos: estudo de coorte retrospectivo com grupo de comparação composto por 2 mulheres não consumidoras para cada consumidor. Consumidores de mulheres foram detectados no Serviço de Neonatologia de um hospital público com um estudo em urina pós-parto positivo para cocaína e / ou cannabis, entre 2009 e 2013. Resultados: 29 mulheres consumidoras foram avaliadas e 58 não-consumidoras. No primeiro grupo, 93% das mulheres eram policonsumidores. Mulheres consumidoras apresentaram maior frequência de: histórico de violência em suas infâncias (p <0,001), consultas prévias (p <0,0045) e adquiridas (p <0,0007), consultas médicas (p <0,0001) e consultas odontológicas (p = 0,0002) emergência, hospitalizações (p <0,0001), e mortes violentas em parentes, comparando com não-consumidores. Conclusões: mulheres que consomem cocaína e / ou cannabis durante a gestação tiveram menor freqüência em consulta agendada, maior número de consultas médicas e odontológicas de emergência, de internação, e mortes. As lesões foram a principal causa de consulta e hospitalização. Nas variáveis avaliadas, as diferenças entre consumidores e não consumidores de gravidez foram significativos.
Palavras chave: cocaína; cannabis; gravidez; atenção à saúde; hospitalização.
Introducción
El consumo de drogas ilícitas (DI) durante el embarazo constituye un problema en ascenso, de importancia para la Salud Pública mundial. Las DI utilizadas más comúnmente varían según el País y el año que se considere, siendo cannabis, cocaína, y opioides los reportados con mayor frecuencia.1-8
En el Servicio de Neonatología de un Hospital Público de La Pampa, cocaína y cannabis han sido las DI halladas con mayor frecuencia en muestras de orina posparto, desde el inicio de la detección en 2009.5
En general, las mujeres consumidoras de cocaína y/o cannabis suelen presentar una elevada frecuencia de factores de riesgo y comorbilidades. Se describen principalmente historial de violencia familiar, antecedentes de abuso sexual en la infancia, enfermedad mental, bajo nivel socioeconómico, infecciones de transmisión sexual, problemas legales, prostitución y situación de calle. Además de lo mencionado, las mujeres consumidoras durante el embarazo en particular, suelen tener mayor número de abortos, alta frecuencia de convivencia con parejas o familiares consumidores de drogas, y hábito de policonsumo.4,5-13 Los controles durante el embarazo suelen ser escasos o nulos.4,5,8
Las mujeres consumidoras de cocaína y/o cannabis durante el embarazo y sus hijos, tienen mayor frecuencia de complicaciones que las no consumidoras, especialmente estudiadas durante la gestación y el período perinatal.6,8,11,14,15
Con posterioridad a esos períodos, los estudios sobre las trayectorias sanitarias de las mujeres consumidoras de DI en el embarazo, son prácticamente inexistentes. Se ha descripto que entre 6 meses y 1 año posparto, presentan una alta frecuencia de persistencia del consumo de drogas, o de recaídas incluso a dosis mayores que las originales si habían disminuido o suspendido el consumo durante el embarazo.1,7,16 Pero se desconocen la frecuencia y motivos de consulta luego del egreso hospitalario con su recién nacido.
Algunos aspectos de la situación sanitaria pos parto del grupo familiar de estas mujeres, se conocen indirectamente por los estudios referidos a sus hijos. Durante la infancia, los hijos de consumidoras requieren más consultas en emergencias, más internaciones, y tienen más intervenciones judiciales (principalmente por maltrato) que los hijos de mujeres sin antecedentes de consumo de durante el embarazo.5-8,17
Los objetivos de este estudio fueron describir y comparar las frecuencias y motivos de consultas médicas y odontológicas e internaciones durante 4 años posparto, de mujeres consumidoras y no consumidoras de cocaína y/o cannabis durante el embarazo. Secundariamente, describir y comparar datos socioeconómicos, registros de violencia, situación familiar/legal y morbimortalidad.
Métodos
Estudio de cohorte retrospectivo
Mujer consumidora de cocaína y/o cannabis durante el embarazo (MCE): mujer con criterio de detección y muestra en orina posparto positiva para cocaína y/o cannabis (de la madre y/o del hijo), realizada en el Servicio de Neonatología del Establecimiento Asistencial Dr. Lucio Molas (EALMolas) de Santa Rosa La Pampa, entre 2009 y 2013.
Los criterios de detección fueron: comunicación actual o historia de uso de drogas, estado mental alterado en la madre, ausencia de control prenatal, complicaciones del sistema nervioso central inexplicables, cambios en la conducta o síntomas compatibles con abstinencia a drogas en el recién nacido. Ante la presencia de al menos un criterio, previo consentimiento escrito, se obtuvieron muestras de orina a la madre y del recién nacido (en frasco colector y bolsa colectora respectivamente).
Método de laboratorio utilizado: prueba rápida en tira reactiva Acon Laboratories (EE.UU.), para la detección cualitativa simultánea de drogas o metabolitos: anfetaminas, barbitúricos, benzodiazepinas, marihuana, cocaína, metadona, metanfetaminas, opiáceos y fenciclidina.
No se requirieron pruebas de confirmación ya que las mujeres reconocieron el consumo.29
Esta cohorte de consumidoras fue registrada por los investigadores a medida que se detectaban, antes del presente estudio.
Mujer no consumidora de cocaína ni de cannabis durante el embarazo (MNCE):
mujer sin criterio de detección, con parto en el mismo Servicio de Neonatología en mismo día o semana que una consumidora.
El grupo de comparación fue seleccionado de los libros de nacimientos de dicho Servicio. La selección se realizó considerando por orden de prioridad: edad materna, peso al nacer y edad gestacional del recién nacido (Tabla 1), localidad de procedencia, y situación ante la seguridad social.
Se seleccionaron 2 mujeres no consumidoras por cada mujer consumidora, para aumentar la potencia del estudio.
No hubo diferencias significativas en ninguna de esas variables, siendo los grupos homogéneos.
Tabla 1. Comparación MCE y MNCE, según variables de selección. Mujeres asistidas posparto en el Servicio de Neonatología del Hospital Molas, La Pampa, entre 2009 y 2013. | ||||
Grupos de mujeres | Comparación entre grupos | |||
MCE | MNCE | |||
(n=29) | (n=58) | |||
Peso del niño al nacer (gramos) |
Media (DE)
(IC 95%) |
3132 (670) 2877-3387 | 3355(444) 3265-3446 | p=0,10 |
Edad gestacional del niño (semanas) |
Media (DE)
(IC 95%) |
39 (2)
38-39 |
39(1)
39-40 |
p=0,25 |
Edad materna (años) |
Media (DE)
(IC 95%) |
22 (5)
21-24 |
22 (4)
23-39 |
p=0,64 |
Residencia Santa Rosa /Toay | 29 | 53 | p=0,165 | |
Obra social /prepaga | no | no | ||
MCE: mujeres consumidoras de cocaína y/o cannabis en embarazo.
MNCE: mujeres no consumidoras de esas drogas en el embarazo.
DE: desvío estandar; IC 95%: Intervalo de confianza del 95% |
El estudio se realizó desde 06/2017 hasta 06/2018. Sin criterios de exclusión.
Variables de estudio: datos socioeconómicos (situación familiar/legal, educación, ocupación), consultas médicas, internaciones, antecedentes de consultas por violencia, obstétricos, enfermedades previas y adquiridas, mortalidad.
Fuentes secundarias:
Para la carga, procesamiento inicial y gráficos se utilizó Excel de Office 4.0. Para el análisis estadístico se utilizó InfoStat 2017, Universidad de Córdoba.
Se realizó estadística descriptiva: frecuencias absolutas y relativas para las variables cualitativas y medidas de tendencia central y de dispersión para las variables cuantitativas. Para la fase comparativa se utilizaron las pruebas de chi-cuadrado (variables cualitativas) o pruebas de comparación de medias, t-Student (variables cuantitativas). Se consideró diferencia estadísticamente significativa un valor de p<0,05. Las tasas se expresan como riesgo relativo (RR) y su intervalo de confianza del 95% (IC95%).
Estudio aprobado por el Comité de Ética en Investigación del EALMolas en 2016.
La confidencialidad se mantuvo codificando y limitando la búsqueda, registro, análisis y acceso a la base de datos del estudio a los 4 autores/investigadores. No se registraron iniciales, nombres ni otros datos identificatorios de pacientes.
Resultados
Se evaluaron los registros de 29 mujeres consumidoras de cocaína y/o cannabis durante el embarazo (MCE), y de 58 no consumidoras (MNCE).
Las DI detectadas en orina en las MCE fueron: cocaína 9 (31%), tetrathidrocannabinol 10 (35%), cocaína y tetrahidrocannabinol 5 (17%), cocaína con fenciclidina y/o benzodiazepinas 5 (17%).
El 93% fueron policonsumidoras durante el embarazo, asociando principalmente cocaína y/o cannabis con tabaco y/o alcohol. Relataron haber consumido tabaco durante el embarazo 93% de las MCE, y 21% de las MNCE (p< 0,0001). El promedio de cigarrillos fumados en el primer grupo fue de 10/día, y en el grupo de MNCE, de 1/día (p<0,0001). El 55% de las MCE había tomado alcohol durante el embarazo, en tanto que ninguna MNCE lo había hecho (p<0,0001).
La edad promedio en que consumieron cocaína o cannabis por primera vez fue de 17 años (rango 11-29).
Datos socioeconómicos
En relación al nivel educativo, en ambos grupos la mayoría de las mujeres tenían secundario incompleto (MCE 59%, MNCE 57%), sin diferencias significativas (p=0,42).
Respecto de la ocupación, 12 (42%) de MCE, y 38 (66%) de MNCE eran amas de casa (p= 0,04). Refirieron dedicarse a la prostitución 2 MCE, y ninguna MNCE.
Se encontraron diferencias significativas respecto de la situación habitacional. Tenían vivienda fija 10 (34%) MCE, y 53 (91%) de MNCE (p<0,0001). En el primer grupo, 2 mujeres no tenían domicilio para reportar, y 8 cambiaron de vivienda durante los 4 años del estudio, generalmente a casas de familiares o amigos. Estas situaciones no se encontraron en MNCE.
Antecedentes familiares y legales
Los grupos difirieron respecto de la existencia de registros de consulta médica por lesión/es producto de violencia, principalmente antes de los 18 años (Tabla 2).
Tabla 2: Frecuencia y rango de edad de consulta por lesión/es
producto de violencia.
Comparación de grupos de mujeres asistidas posparto en el Servicio de Neonatología del EALMolas, entre 2009 y 2013 |
||||
Grupos de mujeres | Comparación entre grupos |
Riesgo Relativo
(IC 95%) |
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MCE | MNCE | |||
(n=29) | (n=58) | |||
Número de mujeres | 20(69%) | 4(7%) | p<0,0001 | 10 |
(3.40-23.99) | ||||
Rango de edad al primer registro de violencia (años) | ||||
18 o más | 2 | 3 | p>0,9999 | |
Menos de 18 | 18 | 1 | p<0,0001 | |
0-5 | 1 | - | ||
6-11 | 8 | - | ||
12-17 | 9 | 1 | ||
MCE: mujeres consumidoras de cocaína y/o cannabis en embarazo.
MNCE: mujeres no consumidoras de esas drogas en el embarazo. IC 95%: intervalo de confianza del 95% |
Tabla 3. Frecuencia de enfermedades previas o adquiridas
durante 4 años posparto.
Comparación de MCE con MNCE, asistidas posparto en el Servicio de Neonatología del EALMolas, entre 2009 y 2013 |
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Enfermedades |
Comparación
entre grupos |
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MCE | MNCE | |||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
(n=29) | (n=58) | |||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
Previas | 11(38%) | 7(12%) | p=0,0045 | |||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
Adquiridas | 17(59%) | 13(22%) | p=0,0007 | |||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
MCE: mujeres consumidoras de cocaína y/o cannabis en
embarazo. MNCE: mujeres no consumidoras de esas drogas en el embarazo
Consultas e internaciones
La Tabla 4 muestra las consultas médicas, odontológicas y las internaciones durante 4 años. En las Tablas 5 y 6 se detallan la frecuencia y los motivos de consultas médicas en emergencias y de internaciones.
Mortalidad:
Hubo 3 muertes durante 4 años en diferentes familias del grupo de MCE. Una mujer falleció por lesiones en siniestro vial, conduciendo alcoholizada; un niño de 4 años falleció con lesiones encefálicas por disparo de arma de fuego, y un padre falleció por herida de arma blanca, ambos en sus respectivos hogares. No hubo fallecimientos de niños ni de progenitores en el otro grupo.
Discusión
En este estudio se evaluó a consumidoras de cocaína y/o cannabis, por ser las drogas más comúnmente detectadas en el Servicio de Neonatología del EALMolas.5 Ambas son las drogas usadas con mayor frecuencia durante el embarazo en el mundo actualmente, luego del tabaco y el alcohol.1-8 En algunas regiones de Estados Unidos, Australia y algunos países de Europa, el consumo de opiáceos en el embarazo es elevado.11,12,15 En nuestra población de puérperas, sólo se detectó un caso desde que se instauró la búsqueda de DI en 2009, y en realidad fue consumido con indicación médica.5 En un estudio reciente en Barcelona, tampoco detectaron opiáceos en orina posparto.3 La existencia de un grupo de comparación doble constituye la principal fortaleza de este estudio. Los dos grupos de mujeres, consumidoras y no consumidoras del embarazo, fueron homogéneos por los criterios de selección utilizados: se asemejaban en edad y lugar de residencia, carencia de obra social o prepaga, y partos asistidos en un mismo Hospital público. La similitud en nivel socioeconómico es importante, por ser un factor de riesgo de uso de DI, y un factor confundidor habitual en estudios sobre la temática.4,10,17 También son similares ambos grupos en nivel educativo, aunque éste no constituyó un criterio de selección sino una variable de estudio. Distintos estudios de cohorte muestran que la mayoría de las mujeres previamente consumidoras de drogas suspenden o disminuyen su uso durante el embarazo, incluso quienes tienen bajo nivel educativo.1,16,18 En este estudio, el nivel educativo de los grupos comparados fue similar. Entre las mujeres que sostienen el consumo durante el embarazo, muy pocas tendrán alguna droga detectada por algún método de laboratorio, ya sea porque en la mayoría de las maternidades no hay protocolo de detección, o por limitación de los criterios, de las pruebas o de las técnicas de obtención de muestras.5 Considerando estas últimas limitaciones, las MCE presentadas en este estudio son un subgrupo que ocupa el vértice de una pirámide de consumidoras de drogas durante el embarazo: las que no cesaron el consumo hasta muy cerca del parto, y cuya dosis fueron suficientemente elevadas para ser detectadas en la orina. El hecho de que fueran policonsumidoras podría relacionarse con la dificultad para cesar el consumo.
El policonsumo es un hábito presente en hasta un 50% de consumidoras durante el embarazo en diferentes estudios, pero no tan elevado como el 93% presentado. La combinación con tabaco y el alcohol es lo más usual, siendo éstas las drogas de abuso consumidas con mayor frecuencia durante el embarazo en todo el mundo.4,5,7,8,9 Es tan frecuente la asociación de tabaco con cocaína y/o cannabis en la bibliografía que se ha sugerido asesorar sobre el riesgo de consumo de DI a cada embarazada fumadora.5,8,12,19
Muchas mujeres del presente estudio habían usado cocaína y/o cannabis desde temprana edad. El policonsumo en la adolescencia se ha asociado con haber padecido maltrato infantil.20 Como se mostró, las MCE tenían vastos antecedentes de violencia registrados en su historia clínica antes de los 18 años, significativamente más frecuentes que en mujeres MNCE. El antecedente de abuso sexual infantil se describe como una forma de maltrato muy frecuente en consumidoras de drogas ilícitas.13,20-22 Una limitación de este estudio retrospectivo, es que no se pudo discriminar a qué tipo de maltrato correspondieron los registros de violencia doméstica que motivaron consulta médica.
Asimismo, las mujeres consumidoras de DI sufren violencia doméstica con frecuencia, y ésta suele aumentar durante los embarazos, provocando mayor riesgo de aborto. Además, ese consumo se asocia con menor protección durante las relaciones sexuales.7,23-26 Esto podría explicar al menos en parte la mayor frecuencia de abortos, sífilis, enfermedad inflamatoria pélvica (asociable también a la prostitución) de las mujeres MCE de este estudio. Recientemente, se ha reportado un riesgo de aborto asociado a consumo de cannabis durante el embarazo, de 12 veces el descripto en no consumidoras.19
La frecuencia de sífilis de este estudio fue similar a un estudio brasilero, en que 16% de embarazadas consumidoras de drogas ilícitas la adquirieron, sin encontrarse casos en no consumidoras.27 La sífilis durante el embarazo también se ha asociado al consumo antes de los 18 años, y a tener una pareja que consume.28
El ingreso al Hospital en período expulsivo del 24% de mujeres MCE podría deberse a la necesidad o deseo de continuar consumiendo hasta el momento más cercano al parto posible, sabiendo que internadas no podrían hacerlo, a presiones del entorno violento o al bajo apoyo social. Estos dos últimos factores son reiterados en estudios de embarazadas consumidoras de DI.8,10 Otro factor que podría relacionarse con la demora en concurrir al Hospital, es el estado mental de estas mujeres, usualmente alterado en consumidores de DI.9,10, Pero particularmente las consumidoras durante el embarazo suelen tener una incidencia significativamente mayor de enfermedad mental que las no consumidoras2,11,19 Sin embargo, en este estudio, sólo 2/29 MCE tenían diagnóstico de “adicción a drogas”, a pesar de tener tiempos de consumo en algunos casos muy prolongados, y varias consultas de emergencia e internaciones por problemas relacionables con drogas.
Posiblemente estas mujeres no tengan un diagnóstico de enfermedad mental por no haber sido suficientemente evaluadas. Todas las MCE habían egresado del Servicio de Neonatología con turno para psicología y subsecretaría de adicciones provincial luego de la detección de DI en orina.5 No se evaluaron esas consultas en particular, pero, como se mostró en resultados, durante los 4 años posteriores al parto la concurrencia a consultas médicas programadas fue escasa, significativamente menor que las MNCE. Este dato concuerda con otras descripciones: las consumidoras de DI son mujeres con baja adhesión a los controles de embarazo, y llevan a sus hijos a pocos controles de salud.4,5,12,17
Los datos sobre mayores consultas por emergencias tanto médicas como odontológicas, y de mayor número de internaciones en mujeres MCE respecto de MNCE, son inéditos. Esta demanda particular de servicios de salud constituye un alerta para la Salud Pública.
La mayoría de las consultas en emergencias y de internaciones en MCE fueron por traumatismos. En un estudio de millones de pacientes internados por lesiones traumatológicas en Estados Unidos entre 2002 y 2011, los consumidores de DI presentaron mayores efectos adversos y requirieron más tiempo de internación que los no consumidores, aspectos no evaluados en este estudio.29 Pese a no tener criterios de detección (y por lo tanto, sin haberse realizado prueba de drogas), las mujeres seleccionadas como grupo de comparación, podrían haber consumido. Este factor podría afectar los resultados disminuyendo las diferencias entre grupos. Para la mayoría de los resultados expuestos, hay muchas preguntas sin respuesta: ¿cúal es la influencia de cada droga, o del conjunto?, la mayoría de las consultas en emergencias e internaciones, la morbilidad y mortalidad aumentadas, ¿son causados por las drogas consumidas?, ¿por cuál de ellas?, ¿o por la violencia preexistente o actual?, ¿o por los otros factores de riesgo?, y ¿se trata de efectos sumatorios o exponenciales?.
Sin embargo, los resultados tienen relevancia para la práctica diaria y la gestión. Se deberían planear nuevos abordajes de las mujeres consumidoras (y de sus familias), superando el actual enfoque de citar a consultas programadas, dada la menor concurrencia a controles programados que muestra este estudio en comparación con no consumidoras. Además, sería importante lograr un seguimiento de la salud mental de las mujeres, abordando el consumo de drogas y los factores de riesgo concomitantes.
Conclusión
Las mujeres consumidoras de cocaína y/o cannabis durante el embarazo presentaron mayores antecedentes de violencia y enfermedad, de consultas médicas y odontológicas de emergencia, de internación y muertes violentas en el grupo familiar, que las no consumidoras. Los traumatismos constituyeron la principal causa de consulta e internación. En las variables evaluadas, las diferencias entre consumidoras y no consumidoras del embarazo fueron significativas.
Conflictos de interés Ninguno
Fuentes de Financiamiento
Financiación: Beca Salud Investiga 2017 “Dr. Abraam Sonis”, Ministerio de Salud de la Nación, Dirección de Investigación para la Salud.
Derecho publicación El manuscrito aquí presentado no ha sido publicado en forma total o parcial, ni enviado a otra revista o medio para su publicación o evaluación
Bibliografía
Recibido: 2019-12-12 Aceptado: 2020-03-12 DOI:http://dx.doi.org/10.31053/1853.0605.v77.n2.26838 ©Universidad Nacional de Córdoba
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