Romano, Silvia (comp.), 2014, Historias Recientes de Córdoba. Política y derechos humanos en la segunda mitad del siglo XX, Editorial de la FFyH/ UNC, Córdoba, 396pp.
El arte de desentrañar el pasado descubre cada vez nuevas perspectivas, nuevos problemas y nuevas fuentes, eso es lo que hacen los siete investigadores que colaboran en la escritura de Historias Recientes de Córdoba. Política y derechos humanos en la segunda mitad del siglo XX. La búsqueda de procesos traumáticos del pasado próximo y local se hace con una rigurosidad y una pertinencia que no asombran en la trayectoria de la compiladora y responsable de la obra y que nos la manifiestan una vez más como una intelectual comprometida en la producción y difusión del conocimiento y en la formación de recursos humanos en investigación.
La obra se compone de cinco artículos que son los resultados de investigaciones sobre fuentes primarias escritas, oficiales, públicas, privadas y testimoniales procedentes de la memoria de los mismos protagonistas; un artículo sobre cuestiones metodológicas; una base de datos biográficos de las personas detenidas-desaparecidas y un artículo final con imágenes de las personas identificadas a través de las fuentes audiovisuales recuperadas y protegidas por el Centro de Documentación Audiovisual.
Debe reconocerse que las tareas han sido titánicas dada la variedad y cantidad de fuentes primarias sobre las que se ha trabajado y los responsables las han realizado magistralmente y con una proyección que trasciende los límites de una obra para el lector de la academia; constituye un insumo para otras búsquedas y para nuevas incursiones en un pasado que se resiste a su clausura.
La resistencia al olvido, atraviesa todos los artículos del libro. El primero de Agostina Gentili, problematiza las prácticas judiciales en relación a las adopciones de menores en guarda y las vías no legales para la ubicación de niños y niñas huérfanos. Se demuestra que tales prácticas que antecedieron a la sustracción de menores operada por el terrorismo de Estado y que hoy constituyen un delito de lesa humanidad, eran frecuentes y contaban con una amplio entramado de complicidades, incluso en el poder judicial.
El segundo, de Gonzalo Pedano relata los proyectos del Taller Total de Arquitectura. Inspirados en una época vibrante y generosa de conocimientos comprometidos con el cambio social, arquitectos y estudiantes cuestionaron los modos de ensañar, de aprender y el sentido mismo de la disciplina a la que quisieron poner al servicio del pueblo y de las transformaciones sociales y económicas de los años sesenta y setenta.
El tercero, de Norma San Nicolás, nos lleva a recorrer la irrupción temprana del terrorismo de Estado en la Universidad Nacional de Córdoba habilitada desde la intervención provincial en 1974. La autora pone en evidencia las prácticas y los gestores del autoritarismo, la intolerancia y la persecución, vigentes entre aquella fecha y el comienzo de la dictadura militar, pasando por la Misión Ivanissevich.
El cuarto, de autoría conjunta de San Nicolás y Romano, se pone en el complejo lugar de mostrar las trayectorias de militantes desaparecidos, restituyendo sus ideales, los espacios de militancia, las opciones políticas, incluyendo la lucha armada y el fin mismo de esos activistas, en manos de la maquinaria represiva clandestina.
El quinto artículo, de Gustavo Morelos recopila datos sumamente importantes para quienes reconstruyen las trayectorias de los hombres y las mujeres víctimas de la represión y de la violencia, se evidencian las cifras del terrorismo de Estado, los indultos, las caídas, los asesinatos y las prisiones. El autor recorre catorce años en los que la violencia política, la mayor parte de las veces, clandestina, fue la motivación principal de un Estado que casi no eligió maneras legales de enfrentar a sus adversarios.
El sexto artículo de Silvia Romano, es una imprescindible mirada sobre la metodología para enfrentar el pasado reciente desde los archivos de la UNC, también es una advertencia sobre las responsabilidades para la conservación y acceso a la memoria de parte de los organismos públicos.
Finalmente, coronan esta obra, dos trabajos que debieron implicar una tarea casi obsesiva de reconstrucción y ordenamiento, de comparación y de contrastación. Uno de ellos es la Base de Datos de estudiantes, egresados, docentes y no docentes de la UNC desaparecidos o asesinados en los años setenta. La base contiene referencias de militancia y profesionales, datos del secuestro y/o desaparición de más de quinientas personas, una manera de completar la siempre ávida conciencia que busca saber quiénes fueron y qué hacían aquellos que el terrorismo de Estado eligió como su blanco. El séptimo artículo de Romano, San Nicolás, Palacios y González Lamfri, recupera las imágenes de muchas de esas personas vinculadas a la UNC a través de su ubicación en registros audiovisuales. En un pasado donde la fotografía no ocupaba el espacio cotidiano que tiene en la actualidad, eran pocas las imágenes de las personas, especialmente en su vida pública, gracias a esos hallazgos, esos estudiantes, docentes y no docentes vuelven a tener un rostro que los vincula a sus vidas políticas.
El terrorismo de Estado recurrió a diversos métodos sistemáticos para anular, borrar y provocar el olvido de los sectores militantes de los años sesenta y setenta, en este aspecto particular, este libro y tras un arduo trabajo, hace su parte para resistir al olvido y construir una memoria del pasado traumático y reciente de la Argentina.
Laura Valdemarca*