El lenguaje y sus interfaces: traducción y cultura (segunda parte)

Language and its Interfaces: Translation and Culture (2nd part)

 

Ida Sonia Sánchez - drasoniasanchez@yahoo.com.ar

Universidad Nacional de Tucumán, Argentina

 

 

Resumen

Cada individuo en su análisis del mundo tiene un marco de referencia mental. La experiencia, única en cada persona, conlleva modos de comprensión y enunciación diferentes. Nos introducimos así en el mundo de la lengua en el que todo texto construido es manifestación de una subjetividad y toda subjetividad es, en sí misma, única. Sabemos que los textos revelan el estado del diálogo cultural de una época porque la comprensión es pluricultural, y ese mundo cultural es trasladado por el traductor al apropiarse de espacios sociales e ideológicos que pueden o no ser incorporados a las lenguas traducidas. Por ello, presentaremos consideraciones generales sobre la lengua, la traducción en sí misma, así como en relación con la cultura, tanto en el plano individual como colectivo, y del traductor como encargado de la transferencia de una lengua-cultura a otra. A partir de estos cuestionamientos, presentaremos un esquema en tres tiempos: primero, nos preguntaremos si la traducción tiene, en efecto, la capacidad de transferir completamente y sin ninguna pérdida un enunciado de una lengua a otra. En segundo lugar, y esta pregunta surge directamente de la primera, si existen en cada lengua espacios culturales para otras lenguas, que permitan dar cuenta de realidades culturales extranjeras. Finalmente, ilustraremos esta tesis con la ayuda de traducciones francesas de obras de Borges, García Márquez y otros escritores latinoamericanos, para observar si la prosa de estos autores ha sido total y efectivamente realizada en forma integral en las traducciones presentadas. Como un esbozo de conclusión para este trabajo, diremos que la traducción es una mediación interlingüística y un caso particular de convergencia de las lenguas, porque hacer transitar un mensaje desde la lengua de origen o de partida hacia la lengua de llegada implica una dinámica propia y pone en evidencia interesantes problemas en el estudio del léxico, de la restitución enunciativa, de la cohesión y de las diferentes conceptualizaciones que, en los diversos universos cognitivos, están dirigidos por las ideologías propias de la sociedad y la cultura.

 

Palabras claves: interculturalidad, interfaz, traducción, cultura, sociedad, identidad

 

Abstract

Each individual when analyzing the world has a mental frame of reference. The experience, unique to each person, involves different modes of understanding and enunciation. We thus enter the world of language in which every constructed text is a manifestation of subjectivity and every subjectivity is, in itself, unique. We know that texts reveal the state of the cultural dialogue of a period of time because understanding is multicultural, and this cultural world is transferred by the translator by taking social and ideological spaces that may or may not be incorporated into the translated languages. For this reason, we will present general considerations on language, translation in relation to itself and to culture, both at an individual and collective level, and on the translator as the person in charge of the transfer from one language-culture to another. Based on these points, we will present a three-step scheme: first, we will ask ourselves whether translation has, in fact, the capacity to transfer completely and without any loss a statement from one language to another. The second question derives directly from the first one: whether there are cultural spaces in each language for other languages, allowing for the consideration of foreign cultural realities. Finally, we will illustrate this thesis with the help of translations into French of works by Borges, García Márquez and other Latin American writers, by analyzing if the prose of these writers has been completely and effectively developed in a comprehensive way in the translations presented. As a conclusion, translation is an interlinguistic mediation and a particular case of convergence of languages, because the transition of a message from the source language to the target language implies its own dynamics and highlights interesting problems in the study of lexicon, the restitution of the enunciation, cohesion and different conceptualizations that, in various cognitive universes, are driven by the ideologies of the society and the culture.

 

Key words: interculturality, interface, translation, culture, society, identity

 


El lenguaje y sus interfaces: traducción y cultura II

 

 

1. Introducción: De la lengua a la traducción y de la traducción a la traductología

 

La actividad intelectual de la traducción plantea problemas comunes cualesquiera sean el género discursivo de partida y según la función que deba cumplir la traducción. En este trabajo, abordaremos, entre otros, los estudios culturales como marco para analizar las influencias que observaremos en algunas traducciones, por ejemplo, las realizadas a Gabriel García Márquez y a Jorge Luis Borges, autores latinoamericanos altamente conocidos por sus obras: Cien años de soledad de García Márquez y «Funes el memorioso» de Borges.

Sabemos que la cultura es el conjunto de maneras de pensar, de sentir y de obrar más o menos formalizadas, que pertenecen a una pluralidad de personas y sirven de un modo particular a ese grupo humano para proporcionarle una identidad distinta. Es interesante repetir el concepto de cultura desarrollado en el año 2000: la problemática de la cultura constituye desde siempre un marco muy importante para trabajar una teoría de la traducción, porque, en este caso, nos situamos a nivel del piso arqueológico y de los modos de ser de cada cultura y de sus interacciones con los modos de traducir. La traducción no es nunca una operación neutra y siempre hay que poner en evidencia las intervenciones del traductor realizadas en el marco de su pertenencia a tal o cual cultura. Pero no se trata de rehacer la cultura, porque hay intervenciones de orden puramente individual, y esta relación que tiene la traducción con la cultura es determinante por el hecho de que el traductor está en el centro de las relaciones de alteridad (dirigirse al otro), al mismo tiempo que, por su actividad traductora, está marcando la identidad de su propio contexto cultural.

No podemos evitar considerar a la lengua dentro de la traducción como la fuerza de contacto con otra lengua que va elaborando un discurso propio y hace su propia resignificación de conceptos, creando a su vez nuevas ideas. Sabemos que el contacto de lenguas es, justamente, la base científica y lingüístico-pragmática de lo que resultará el discurso de la traducción. Sabemos que el discurso aparece por un desplazamiento del sistema de la lengua hacia el proceso, es decir que las diferentes incorporaciones de elementos lingüísticos producirían un proceso semiótico. En la producción discursiva de la traducción, el proceso es un discurso especial resultado de la transferencia.

Las lenguas en contacto proveen de significaciones particulares al encuentro en la comunicación de los seres humanos, con la característica de la presencia de un nexo muy importante en la transferencia: el traductor, quien por su actividad plantea su propio contexto en la sociedad y en la cultura de su tiempo, teniendo en cuenta los valores comunicativos, enunciativos, ilocutivos e interaccionales que surgen de una lengua y que deberán combinarse con los valores comunicativos, enunciativos, ilocutivos e interaccionales de la otra lengua.

Sin embargo, el espacio y el tiempo de una cultura constituye el primer marco de la cognición, ese marco a partir del cual un texto recibe sentido y valor. Se podría plantear que ese marco aparece también en las prácticas de la traducción dentro de un estado de la sociedad. Si hablamos de prácticas de la traducción, ello concierne, en principio, a la selección de los textos que son extranjeros a la cultura de la sociedad receptora; es decir, el traductor y las instituciones buscan representaciones concretas en esos textos y, luego, hacen las interpretaciones de esas representaciones. Entramos aquí en el aspecto colectivo y cultural de las producciones en traducción. De allí surge que el primer lugar del sentido no será el texto que se debe traducir, sino el lugar cultural que suscita esa traducción.

La intención de la cultura puede definirse como una estructura funcional que es exterior a lo que normalmente estamos acostumbrados. La cultura circunscribe el espacio de las convenciones que rigen la recepción de todo acto traductivo. Numerosos autores observan que, para manejar una lengua con solvencia, no es suficiente conocer solo el vocabulario y la gramática, sino que hay que reconocer las instituciones, los lugares, las situaciones en las que utilizamos ese vocabulario y esa gramática.

Llegamos así a la convergencia de todas estas actividades lingüístico-traductivas insertas en una sociedad y en una cultura. Desde los años 70, los estudiosos de la traducción convinieron en hablar de una disciplina o ciencia: la traductología, que nucleara todo lo referido a la traducción, transferencia o contacto de lenguas. Desde ese momento, la traductología tiene una trayectoria disciplinaria con los más diversos enfoques lingüísticos, textuales, comunicativos, semióticos, pragmáticos, cognitivos o culturales.

La traductología es una disciplina abarcadora que plantea temáticas superpuestas en el campo de la lingüística, la psicolingüística, la sociolingüística y los estudios culturales, así como los detalles científicos de los mecanismos de comprensión, de transferencia y de producción discursiva; estudios que requieren de datos proporcionados por la semiología o la semiótica (visual, discursiva, cultural), la lingüística aplicada, la semántica léxica, la ciencias cognitivas, las ciencias de la comunicación, todas ellas en relación con el análisis del discurso, la lingüística del texto y la gramática textual. Este texto, surgido de mi experiencia, y en apariencia descriptivo de la traductología, es la explicación de la práctica traductológica y de la actividad individual y colectiva en la docencia de la traducción. Antoine Berman (1989) sostiene que «la traductología es la reflexión de la traducción sobre sí misma a partir de la naturaleza de su experiencia» (p. 674).

 

2. Investigación en traductología

 

En cuanto a las actividades de investigación desde el comienzo de mis tareas profesionales y dentro de los programas del doctorado en lingüística y traductología en la Universidad de Montreal, así como en el seno del CONICET y del CIUNT, organismos argentinos de investigación universitaria, me he dedicado a profundizar la interfaz del lenguaje, traducción y cultura[1].

Me complace introducir aquí un aspecto interesante entre las motivaciones de mis tareas, que he titulado en el trabajo presentado en la Universidad de Salamanca en noviembre de 2018 y en otras conferencias anteriores: el discurso de la traducción. En este introduje ejemplos de unidades culturales identitarias de los autores latinoamericanos que había trabajado en mis investigaciones, en especial en las obras de Jorge Luis Borges y de Gabriel García Márquez. En Borges, analizaremos algunas unidades como el compadrito, que en francés aparece como un gars du bourg. El memorioso, el cronométrico y el orillero, que no logran darse en francés con el sabor del arrabal porteño, sobretodo en «Funes el memorioso» que, desde el comienzo, proporciona en francés un título que explica las diferencias culturales: Funes ou la mémoire[2]. En la versión francesa, observamos que la lengua se apropia adecuadamente de los elementos enunciativos, no así de algunos léxicos. Por ejemplo, para traducir el memorioso no se apoya estrictamente en el adjetivo sino que utiliza paráfrasis explicativas diciendo que era un hombre que recordaba todo. Y para traducir literato, cajetilla y porteño, Verdevoye opta por: littérateur, rat de ville, Buenos-airien. Borges continúa trabajando en estos textos sobre ‘el recuerdo’, que es como una especie de eje temático donde se sitúa su prosa. El lenguaje de Borges es fino y delicado. Es un español culto. Borges muestra con las palabras, se ven las palabras en Borges y eso dificulta a veces la transferencia en traducción. El texto borgiano nos ha permitido ver las interacciones de la cultura argentina y francesa recordando lo que Claude Lévi-Strauss (1990, pp. 207-206) afirmó: «cada cultura se desarrolla gracias a sus intercambios con otras culturas. Pero es necesario que cada una ponga algo de resistencia. Ya que, si es la diferencia de culturas la que hace su encuentro fecundo [...] ese juego en común acarrea su uniformización progresiva». Para situar también otras unidades culturales identitarias, definición que me pertenece, con la intención de diferenciar un léxico netamente propio de estos autores, que trasuntan una atmósfera particular del lugar de América, especialmente de Latinoamérica, mostraremos luego textos de apoyo expresamente extraídos de Cien Años de Soledad de Gabriel García Márquez, ya que resulta necesario abordar en el próximo desarrollo algunos conceptos sociopolíticos sobre la traducción de los discursos para analizar el léxico culturalmente identitario.

 

3. El contexto sociopolítico del discurso

 

Una gran cantidad de factores regulan las relaciones sociales entre la traducción y la situación. Existe una actividad de importación intelectual y una actividad de exportación del mismo tipo. La antropología social ha reflexionado profundamente sobre las determinaciones institucionales y políticas de la traducción. El peligro de las deformaciones que pueden sufrir las informaciones y el sentido de los textos en la transferencia de una lengua a otra se deben a veces, a los valores que sostienen los mismos traductores.

En lo que concierne al entorno cultural de la lengua, habíamos observado durante el desarrollo del trabajo, que este aspecto compromete gravemente la traducción. En cada lengua que se adapta a las necesidades de aquellos que la hablan en de su entorno político, climático, etc., que es el suyo, a veces, encontramos un número considerable de palabras para expresar lo que se dice en otras lenguas con un solo vocablo.

Cuando traduje al francés Cien años de soledad de García Márquez,[3],  al trabajar con la lengua española de Colombia, y aun siendo mi lengua materna el español, había algunas palabras propias de la cultura colombiana que plantearon dificultades. Entonces mi trabajo se centró en investigar, en los dos textos, unidades culturales identitarias[4], aquellas palabras que para Colombia significaban todo lo que el contexto social, político, climático, etc. le proporcionaban y las que, en mi lengua de traductora argentina, no se comprendían totalmente. Imaginémonos para el traductor francés lo que fue la inmersión en el contexto colombiano[5].

          Con el objeto de mostrar las unidades culturales identitarias en los análisis de los textos de García Márquez, voy a presentar un esbozo de análisis contrastivo francés-español del autor colombiano.

 

4. Análisis contrastivo francés-español en García Márquez

 

La problemática de la cultura nos plantea la siguiente interrogación: ¿cuál es la representación o imagen mental que realizamos de un concepto y de una palabra que vamos a traducir? Esta actividad supone la referencia a objetos, predicaciones, la orientación de los enunciados en el tiempo y en el espacio, el uso de diferentes tipos de contexto. Es legítimo, pues, interpretar estos actos como aspectos universales de lo lingüístico, pero podemos diferenciar una manifestación concreta e individual de lo lingüístico, que es el enunciado en su actualidad, denominado discurso.

Analizaremos, a continuación, algunos párrados seleccionados de este autor. Veremos, primero, cuáles son las unidades culturales identitarias y cuál es el potencial comunicativo del léxico. Observaremos, luego, el enriquecimiento conceptual producido por la fuerza del léxico. Daremos especial interés a las sinestesias o transformaciones de la escritura, para terminar con el encanto que produce el efecto de creación mágica en el discurso del escritor colombiano.

 

–No serás feliz mientras tus padres permanezcan insepultos. Rebeca se estremeció. Como en el recuerdo de un sueño se vio a sí misma entrando a la casa muy niña, con el baúl y el mecedorcito de madera y un talego cuyo contenido no conoció jamás. (p. 97)

 

–Tu ne seras jamais heureuse tant que tes parents resteront sans sépulture. Rebecca tressaillit. Elle eut l’impression de se rappeler un rêve et revit son arrivée à la maison, tout enfant, avec sa mallette et le petit fauteuil à bascule en bois, et un étui dont elle ne sut jamais ce qu’il contenait (mi propuesta).

 

Observamos en estos pasajes las unidades culturales talego, del español colombiano,  y étui, del francés estándar.

En estos próximos ejemplos advertimos cómo el léxico del español colombiano tiene una fuerza superior al léxico francés, lo que enriquece conceptualmente la frase.

 

Fue la culminación de cuatro semanas de sobresaltos en casa de los Moscote []

Ce fut l’apothéose de quatre semaines de préparatifs fiévreux chez les Moscote [...]

[...] encogido en un banquito de madera bajo el cobertizo de palmas, el enorme anciano [...] […] tassé sur un petit banc en bois et sous l’auvent qu’on lui avait fabriqué avec des palmes, l’énorme vieillard [...]

El padre Nicanor Reyna [...] era un anciano endurecido por la ingratitud de su ministerio. Tenía la piel triste, casi en los puros huesos, y el vientre pronunciado y redondo y una expresión de ángel viejo que era más de inocencia que de bondad. (p. 104)

Le père NicanorReyna [...] était un vieil homme endurci par l’ingratitude de son ministère. C’était un être morose qui n’avait bientôt que la peau sur les os, avec un ventre proéminent et rondelet et une espression d’ange sur le déclin qui était faite de simplicité d’esprit plutôt que de bonté. (p. 92)

 

García Márquez presenta aquí un ejemplo extraordinario de sinestesia que reúne no solamente a la semiosis de la cultura, sino también a la transformación de una lengua hablada durante años y años por un pueblo: la piel triste es característica del campesino colombiano. Y la semiosis que realizan el autor y el traductor está evidentemente marcada en el vocablo morose cuando dice: C’était un êtremorose.

 

[...] chocolate espeso y humeante que él se tomó sin respirar. Luego se limpió los labios con un pañuelo que sacó de la manga, extendió los brazos y cerró los ojos. Entonces el padre Nicanor se elevó doce centímetros sobre el nivel del suelo.

[...] une tasse de chocolat bien crémeux et fumant qu’il avala sans prendre le temps de respirer. Puis il s’essuya les lèvres avec un mouchoir qu’il sortit de sa manche, leva les bras en croix et ferma les yeux. Alors on vit le père Nicanor s’élever de douze centimètres au-dessus du sol.

 

 

5. Conclusión

 

Finalmente, la relación que la lengua realiza con el discurso produce en español un efecto de creación mágica. Cuando el francés realiza la transferencia, queriendo conservar ese efecto mágico exagera la escritura por medio de paráfrasis que, si bien respetan la conceptualización, no logran contextualizar el valor inherente del léxico.

El campo de ejercicio empírico de este trabajo es el discurso de García Márquez. Las unidades culturales identitarias no solo corresponden a palabras, sino que se extienden sobre conjuntos significantes y actos que producen los discursos en el ejercicio de semiosis[6] que propone la traducción, concluyendo que los diversos universos cognitivos de lenguas diferentes están dirigidos por las ideologías propias de la sociedad y la cultura.

 

Corpus de estudio y referencia

Borges, J. L. (1951). Funes ou la mémoire. En Fictions. París: Gallimard. Traducido del español por P. Verdevoye, N. Ibarra y R. Caillois.

Borges, J. L. (1974). Funes el memorioso. En Obras completas I. Buenos Aires: Emecé Editores.

García Márquez, G. (2003). Cien años de soledad. Buenos Aires: Debolsillo.

García Márquez, G. (1968). Cent ans de solitude. París: Éditions du Seuil. Traducido del español por Claude y Carmen Durand.

 

Otras lecturas

Brisset, A. (1998). L’identité culturelle de la traduction - En réponse à Antoine Berman. Palimpsestes, (11), 31-51. Recuperado de https://journals.openedition.org/palimpsestes/1526.

Ladmiral, J.-R. (1979). Traduire : Théorèmes pour la traduction. París: Payot.

Larose, R. (1994). Qualité et efficacité en traduction : réponse à F. W. Sixel. Meta, 39(2), 362-373. Recuperado de https://www.erudit.org/en/journals/meta/1994-v39-n2-meta187/003405ar/.

Larose, R. (1989). Théories contemporaines de la traduction. Quebec: Presses de l’Université de Québec.

Lotman, I. M. (1996). La semiosfera I. Semiótica de la cultura del texto. Edición de Desiderio Navarro. Valencia: Frónesis Cátedra. Universitat de València.

Sánchez, S. (2018). El discurso de la traducción. En C. Carrasco, M. Cantarero Muñoz, C. Díez Carbajo (eds.), Traducción y sostenibilidad cultural: sustrato, fundamentos y aplicaciones (p. 375-382). Salamanca: Ediciones Universidad de Salamanca.

Sánchez, S. (2017). La traduction intersémiotique. Congrès mondial de traductologie «La traductologie : une discipline autonome ». París-Nanterre, abril de 2017.

Sánchez, S. (2005). La traductología: estudio de lenguas en contacto. Hermeneus,  7, 159-173. Disponible en https://recyt.fecyt.es/index.php/HS/issue/view/594.

Sánchez, S. (2000). Las interfaces del lenguaje: traducción y cultura . Meta. Journal des traducteurs / Translator’s journal, 45(4), diciembre de 2000. Disponible en https://www.erudit.org/fr/revues/meta/2000-v45-n4-meta161/004026ar.pdf.

Sánchez, S. (2000). Traducción, lengua y cultura. Tucumán: Ediciones de la Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Nacional de Tucumán.

 

 



[1] Este desarrollo es una segunda parte de lo que se presentó en la revista Meta: Journal des Traducteurs / Translators’journal, 45(4), diciembre de 2000, Les Presses de L’Université de Montréal.

[2] Versión en francés del traductólogo Paul Verdevoye en Fictions, París, Gallimard, col. Folio.

[3] Traducido también por escritores franceses, entre ellos el trabajo de Claude et Carmen Durand, Editions du Seuil, 1968-1995.

[4]El término unidad cultural identitaria es de mi autoría, ya que no pude encontrar en mi código de investigación otro término que abarcara toda la significación de este.

[5] Trabajo presentado en el Congreso por los 800 años de la Universidad de Salamanca.

[6] La semiosis es el proceso por el cual el hombre encuentra el sentido de la lengua interpretando aquello que subjetivamente ha captado dentro de su enciclopedia. Según Eco, enciclopedia es el conjunto de informaciones que nuestra cognición ha retenido en memoria y nos permite representar el mundo que nos rodea (1978).